Bloomberg — El presidente de México, Andrés Manuel López Obrador, congregó a miles de personas en una marcha para celebrar el quinto aniversario de su victoria electoral.
Los partidarios llenaron la plaza principal del Zócalo en el centro de Ciudad de México, que puede albergar a más de 100.000 personas, para su discurso del sábado. El presidente estuvo flanqueado por todo su gabinete, así como por miembros del Congreso y gobernadores de su partido, Morena.
AMLO, como se conoce al presidente, hizo un recuento de sus principales logros al frente del país, destacando su lucha contra la corrupción, la mesura en el gasto público y proyectos clave de infraestructura como el Tren Maya.
Dijo que su gobierno planea que México sea autosuficiente en combustibles y que dejará de importarlos el próximo año. AMLO también presumió la fortaleza de la moneda local frente al dólar y la capacidad de su gobierno para controlar la inflación.
“Nuestro gobierno está más fuerte que nunca”, dijo. “Una amplia mayoría está con nosotros. El pacto ha funcionado. El pacto entre el pueblo y su gobierno”.
El mitin tuvo lugar mientras el partido gobernante, Morena, celebra una carrera interna de tres meses para elegir al sucesor del carismático AMLO, en un giro respecto a un proceso histórico en el que un presidente en funciones elegía a dedo al candidato de su partido. La selección del líder por parte de Morena incluirá una serie de encuestas para determinar a quién prefieren los votantes.
Los autobuses inundaron la capital el sábado, trayendo simpatizantes de varios estados de México. La gente se desparramó por las calles aledañas a lo largo de varias cuadras, sosteniendo carteles y banderas, con muchos vestidos de burdeos, el color oficial del partido del presidente. El discurso de AMLO, de una hora de duración, fue interrumpido casi al final por la fuerte lluvia y algunos seguidores salieron en busca de refugio, mientras que otros se quedaron con paraguas e impermeables.
Entre los simpatizantes de AMLO en la reunión estaba Francisco Javier Martínez, de 66 años, un pensionista de San Luis Potosí que solía trabajar en la Fábrica de Moneda y Timbre del país y que viajó con amigos en autobús para estar en el mitin.
“Tengo que mostrar mi apoyo y demostrar a los que no quieren que el presidente triunfe que estamos unidos, que tenemos fuerza”, dijo. “Como soy pensionista, este presidente ha cambiado mi vida diaria, pero también he visto cómo sus programas de bienestar han ayudado a otros en mi comunidad”.
Roberto Zaldívar, de 78 años y residente en Ciudad de México, que trabaja en la fabricación de productos metálicos, trajo consigo al mitin a su mujer, su hija, sus dos hijos, su nieta y su sobrino. Dijo que esperaba continuidad después de que termine el mandato de AMLO.
“Después de tantos años de buscar un cambio, por fin llegó. Ahora sí queremos que la transformación continúe”, dijo Zaldívar.
AMLO seguirá siendo presidente hasta el próximo año. Dijo el viernes que esperaba que el mitin fuera uno de los “últimos” en lo que le queda de mandato.
Con la asistencia de Nicolle Yapur
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