Ciudad de México — Aeroméxico, una aerolínea mexicana, mantendrá en tierra sus aviones Boeing 737 MAX-9 debido al proceso de revisión activado por la Federal Aviation Administration (FAA) tras el incidente de despresurización vivido este fin de semana en un vuelo de Alaska Airlines.
La decisión afectará a 19 aeronaves de la flota de 152 unidades de la aerolínea, confirmó la Aeroméxico a Bloomberg Línea.
“La inspección de nuestra flota MAX-9 concluirá a la mayor brevedad para continuar con las operaciones programadas y seguiremos trabajando coordinados con Boeing, así como con las autoridades competentes”, dijo la aerolínea en un comunicado.
Con esta decisión, las tres principales aerolíneas de México enfrentan disrupciones debido a revisiones aceleradas a una parte de su flota.
Las líneas aéreas de bajo costo Volaris y Viva Aerobus pasan por este proceso debido a un llamado acelerado de Pratt & Whitney que inició a mediados de 2023 y podrá tomar varios meses de 2024.
En su comunicado, Aeroméxico señaló que la revisión concluirá con la mayor brevedad.
FAA ordenó la inmovilización temporal y las inspecciones de los 171 unidades 737 Max 9 operadas en todo el mundo, luego que una sección del fuselaje de un nuevo avión de Alaska Airlines explotara poco después del despegue, de acuerdo con Bloomberg.
Entre las aerolíneas afectadas, además de Aeroméxico y Alaska, se encuentran United Airlines y Copa Airlines.
Esta no es la primera vez que el modelo 737 MAX es puesto en tierra. El modelo de un solo pasillo dejó de operar durante 20 meses, entre 2019 y 2020, tras los incidentes fatales de Lion Air y Ethiopian Airlines en el que perdieron la vida 346 personas.
Eso incidentes implicaron como solución la mejora del software en las aeronaves, así como modificaciones en la separación de cables. La reanudación de la operatividad de las unidades estaba sujeta a una capacitación de los pilotos y a realizar actividades de conservación exhaustivas.