Bloomberg Línea — El senador de Florida, Marco Rubio, dejó entrever que el presidente electo de los Estados Unidos, Donald Trump, no intervendrá Haití, pese a la crisis de seguridad que vive por cuenta de las pandillas. Sin embargo, planteó la posibilidad de apoyar a la misión multinacional aprobada por la ONU de la misma manera en que lo hizo la administración de Joe Biden.
Rubio, nominado a secretario de Estado de EE.UU. cuando Trump se tome posesión como presidente, el próximo 20 de enero, aseguró que se mantendrá vigente la política en torno al país caribeño. Lo hizo durante una audiencia de confirmación ante el Comité de Relaciones Exteriores del Senado, este miércoles.
“Hay que establecer una seguridad básica y no va a provenir de una intervención militar estadounidense. Por lo tanto, la medida es que podamos alentar a los socios extranjeros a que proporcionen cierto nivel de estabilidad y seguridad en Haití, de modo que se puedan explorar las oportunidades de tener un Gobierno de transición que tenga legitimidad y que, en última instancia, pueda conducir a la celebración de elecciones”, dijo en declaraciones recogidas por el Nuevo Herald.
Leer más: Biden se atribuye mérito de acuerdo entre Hamás e Israel, restándole importancia a Trump
Desde el asesinato del presidente Jovenel Moïse, en 2021, la población de Haití ha estado sometida por las pandillas, que en 2024 fueron responsables de alrededor de 5.600 asesinatos, según la ONU. Y, aunque tres líderes han fungido como primeros ministros temporalmente, no pudieron convocar a elecciones por cuestión de orden público.
En ese contexto, la ONU aprobó la presencia de una misión multinacional de apoyo a la seguridad en el territorio haitiano hasta el 2 de octubre de 2025, si bien el presidente Joe Biden presionó para que se transformen una fuerza de paz convencional de ‘cascos azules’. Sin embargo, su propuesta no fue aprobada tras la negativa de China y Rusia.
La misión hoy cuenta con centenares de uniformados de Policía, la mayoría keniatas, pero también provenientes de Guatemala y El Salvador patrullando en las calles de Haití, aunque los resultados continúan sin ser los esperados.
Leer más: Estos CEO de Silicon Valley planean asistir a la investidura de Donald Trump
Rubio también expuso que “no hay una respuesta fácil” a la situación que vive Haití y, aunque aseguró esperar que pronto se lleven a cabo las elecciones en ese país, seguramente “lleve mucho tiempo”.
“Se trata de elementos de pandillas malvadas que operan en Haití y que no solo han desestabilizado a Haití, sino que amenazan con desestabilizar a la República Dominicana, sin mencionar la presión migratoria que ejercen sobre Estados Unidos, las Bahamas y otros lugares de la región”, comentó.
Resta esperar qué posición asume Estados Unidos frente a otros países de la región como Cuba, al que Biden retiró de la lista de patrocinadores del terrorismo, y Venezuela, tras el apoyo de la administración saliente a Edmundo González Urrutia, al que reconoce como presidente electo.