S&P Global revisa la perspectiva de Honduras a negativa por menor flexibilidad monetaria

La agencia hizo referencia a que los montos vendidos en las subastas diarias cubren solo alrededor del 40% de la demanda de dólares, lo que subraya la escasez de divisas en la economía.

Por

Bloomberg Línea — S&P Global Ratings revisó la perspectiva de sus calificaciones a largo plazo sobre Honduras a negativa desde estable. Al mismo tiempo, afirmó sus calificaciones crediticias soberanas de largo y corto plazo ‘BB-/B’.

La agencia de calificación dijo que la perspectiva negativa incorpora su opinión de que el tipo de cambio (HNL) y las rigideces monetarias del país podrían dañar el perfil externo del país y afectar la confianza de los inversores, así como reducir sus perspectivas de crecimiento económico.

Lea más: Así van las cuentas de los países de Centroamérica para el presupuesto de 2025

En un escenario bajista, S&P Global advirtió que podrían bajar las calificaciones en los próximos seis a 12 meses si el acceso limitado al financiamiento externo conduce a una mayor disminución de las reservas internacionales y empeora la liquidez externa.

“Además, la limitada flexibilidad del tipo de cambio y las posibles incertidumbres políticas podrían deteriorar la confianza de los inversores y traducirse en menores perspectivas de crecimiento económico, lo que llevaría a una rebaja”, dijo en el comunicado.

En contraparte, un escenario alcista, de revisar la perspectiva a estable en los próximos seis a 12 meses, ocurriría “si vemos avances en las políticas monetaria y cambiaria que generen financiamiento externo adicional de acreedores oficiales y comerciales”.

La aplicación satisfactoria de reformas que se traduzcan en unas finanzas públicas más sólidas y un mayor crecimiento del PIB a largo plazo, al tiempo que se abordan las deficiencias del sector energético, también podría conducir a una mejora, agregó.

Las calificaciones de ‘BB-’ de Honduras reflejan el bajo PIB per cápita del país, la debilidad de las instituciones y la muy limitada flexibilidad del tipo de cambio, lo que limita la eficacia de la política monetaria.

Por otro lado, el país centroamericano ha mantenido déficits fiscales y niveles de deuda moderados, y la mayor parte de la deuda soberana proviene de fuentes oficiales, dijo la agencia.

Flexibilidad monetaria limitada

S&P Global también habló sobre “la fuerte intervención” del Banco Central de Honduras (BCH) en el mercado de divisas y cómo el pequeño tamaño de los mercados de capital nacionales limitan la eficacia de la política monetaria.

La agencia recordó que en abril de 2023, la autoridad monetaria cambió el sistema de asignación de dólares al mercado, debido a las acusaciones de que los bancos privados habían utilizado una discrecionalidad injusta en el suministro de divisas a sus clientes bajo el sistema anterior.

Como resultado, el BCH volvió a un sistema de subastas desde la asignación del mercado interbancario. Los agentes de cambio están obligados a entregar las entradas de divisas al banco central, que luego vende dólares a la economía a través de subastas, priorizando las importaciones de energía.

Los montos vendidos en las subastas diarias cubren solo alrededor del 40% de la demanda de dólares, lo que subraya la escasez de divisas en la economía.

Las reservas internacionales netas cayeron a US$6.800 millones en septiembre de 2024 desde los US$8.400 millones de diciembre de 2022. “Pronosticamos que los déficits en cuenta corriente se estabilizarán en torno al 3,3% del PIB durante el período 2025-2027 y que las necesidades brutas de financiamiento externo promediarán el 96% de los ingresos por cuenta corriente y las reservas utilizables durante los próximos tres años”.

Es probable que las finanzas públicas de Honduras se mantengan estables en 2024-2027. “Proyectamos una consolidación fiscal gradual, en línea con el marco fiscal de mediano plazo del gobierno y su ley de responsabilidad fiscal, que apunta a un déficit de 1% para el sector público no financiero”.

Clima de inversión de Honduras

S&P Global señala que el debilitamiento del apoyo político y el aumento de la polarización limitarán la capacidad del gobierno para aprobar reformas antes de las elecciones presidenciales y legislativas de noviembre de 2025.

La aprobación de la reforma para reducir las exenciones fiscales, conocida como Ley de Justicia Tributaria, entable retrasos en el Congreso Nacional. Diez legisladores que pertenecían al oficialista Partido Libertad y Reembolso (Libre) abandonaron el partido gobernante de la coalición, dejándolo con solo 40 de los 128 escaños.

Lea más: Honduras enfrenta 15 casos pendientes en el CIADI, a pocos días de surtir efecto su salida

También, la incertidumbre sobre la eliminación de las Zonas Económicas Especiales (ZEDE), declaradas inconstitucionales por la Corte Suprema de Justicia (CSJ), y la decisión de abandonar el tribunal internacional de arbitraje CIADI podrían indicar un debilitamiento del estado de derecho y disuadir la inversión privada.

Además, la corrupción percibida sigue fomentando el descontento público. A pesar de los intentos de reforzar los controles durante esta administración, ha habido escándalos que involucran a altos funcionarios del gobierno.

“Esperamos que el crecimiento del PIB se desacelere hasta el 3% en los próximos dos años debido a la debilidad de la inversión privada y a la incertidumbre electoral, seguido de un aumento hasta el 3,6% a partir de entonces”.

El crecimiento del ingreso per cápita de Honduras se ha visto afectado por muchos años de baja inversión, particularmente en el sector energético, donde las ineficiencias han producido apagones regulares que aumentan los costos y disuaden la inversión privada. Además, indicadores sociales como la alta pobreza, en torno al 50%, y la alta informalidad, en torno al 70% de la población en edad de trabajar, siguen limitando el crecimiento económico.