Honduras sigue cubierta por un manto de smog, con las principales ciudades del país lidiando con niveles extremos de contaminación del aire que superan las pautas de la Organización Mundial de la Salud (OMS), lo que ha provocado advertencias de salud y cierres de escuelas.
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Las autoridades atribuyen la crisis a los incendios forestales exacerbados por el fenómeno de El Niño, planteando riesgos significativos para los residentes y los ecosistemas.
El director del Instituto de Conservación Forestal (ICF), Luis Soliz, dijo a medios nacionales que el país registra este año 2.627 quemas, con 211.292 hectáreas afectadas.
En Tegucigalpa, la concentración de PM2,5 (partículas peligrosas en el aire de menos de 2,5 micrómetros de diámetro) era el lunes 42,6 veces superior al valor guía anual de calidad del aire de la OMS, según IQAir, empresa suiza que mide el Índice de calidad del aire (ICA). Mientras que en San Pedro Sula, la segunda ciudad más grande, 12 veces superior a las pautas.
Para este martes, según la base de datos en tiempo real del portal IQAir, el nivel de PM2.5 de la capital es 29 veces superior al valor guía, por lo que aún se considera muy perjudicial.
Muchos vuelos han sido cancelados o desviados debido a la poca visibilidad en los cuatro aeropuertos internacionales del país, informó Aeronáutica Civil.
En criterio de Edwin García, representante del CATIE en Honduras, una estrategia para abordar la crisis generada por la contaminación son los sistemas agroforestales, que se basan en los principios de no quemar para plantar, cuidado de la regeneración natural de los árboles, manejo de la poda y cobertura del suelo, acciones que han demostrado ser eficaces en la restauración de ecosistemas.
Suspensión de clases en Honduras
Este lunes, la Secretaría de Educación adelantó el receso académico, programado en el Calendario Escolar 2024 entre el 8 y 12 de julio, del 21 hasta el 24 de mayo para todos los niveles, jornadas y modalidades de estudio a nivel nacional en centros educativos gubernamentales y no gubernamentales, como medida ante los desafíos académicos presentados por los efectos del cambio climático, que han dejado la capa de humo y una fuerte ola de calor en gran parte del país.
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Los centros educativos no gubernamentales de calendario anglosajón (bilingües) deberán ajustar internamente las actividades de los estudiantes en vista del cierre del año lectivo.
Por su parte, el gobierno de Honduras amplió la modalidad de teletrabajo para los empleados de la administración pública del Distrito Central para lo que resta de la semana.
La Comisión Permanente de Contingencias (Copeco) subió el lunes a alerta roja a siete departamentos, dos en amarilla, nueve en verde, por los altos niveles de contaminación atmosférica.
Por ahora, en los principales motores de búsqueda, como Google, se ha disparado el término de consulta ‘purificadores de aire’. También las tiendas por departamento del país están publicitando una gama de estos productos por precios que promedian los 995 lempiras (HNL), unos US$40.
Problemáticas similares enfrentan Guatemala, donde el Instituto Nacional de Sismología, Vulcanología, Meteorología e Hidrología (Insivumeh) emitió el 20 de mayo un boletín especial sobre el índice de la calidad del aire en Guatemala en categoría “peligrosa”.
Debido a esa condición, la institución recomendó evitar actividades físicas al aire libre sin ningún tipo de protección, en especial, personas con enfermedades cardiacas o pulmonares, adultos mayores y niños. Mientras que en el vecino Belice, el gobierno ha suspendido las clases.