Bloomberg Línea — Tras 13 días de huelga, el Sindicato de Trabajadores de la Industria de la Bebida y Similares (STIBYS) y la Cervecería Hondureña, empresa subsidiaria de AB InBev (BUD), lograron un acuerdo este jueves 19 de diciembre.
En redes sociales, el secretario de Estado en los Despachos de Trabajo y Seguridad Social, Wilmer Javier Fernández, confirmó que las partes firmaron 11 cláusulas y seis actas. “Un honor haber contribuido de mediador para alcanzar la firma de XVIII Contrato Colectivo. Siempre hay que persistir en el diálogo social”, dijo el funcionario.
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Los trabajadores exigían la firma del Contrato Colectivo de Condiciones de Trabajo, que incluía el rescate de 1.500 puestos de trabajo permanentes, “precarizados por la tercerización”.
En la madrugada de este día, el sindicato y la compañía finalmente lograron ponerse de acuerdo en los cuatro últimos puntos que faltaban, relacionados con las clausulas 13, 65, 70 y 73.
“Tenemos un buen contrato colectivo. Hemos logrado grandes conquistas”, dijo Julio Flores, vocero oficial del STIBYS, a través de un comunicado, en el que también llamó a los afiliados de la organización a “retirar nuestras pertenencias (en los sitios de concentración) y dejar todo en orden e ir a descansar”.
Los detalles se darán a conocer en las próximas asambleas “en el momento que se convoquen y ahí se darán cuenta de los logros que han obtenido a través de su lucha de estos 13 días arduos”, agregó.
En estos espacios está previsto que la junta directiva del sindicato informe a sus miembros de todas las cláusulas que fueron negociadas, “desde las pláticas directas, mediación, conciliación y durante el proceso de huelga para conseguir el acuerdo en las 10 cláusulas que faltaban”.
A causa de la huelga, los comercios comenzaron a resentir el desabastecimiento de bebidas en el mercado nacional, tomando una serie de medidas, entre ellas, las de limitar las ventas al por mayor de los productos.
Cervecería Hondureña está presente en todo el país centroamericano, con 16 centros de distribución, 85.000 clientes y más de 3.300 empleos directos, de acuerdo con cifras de la compañía. Su portafolio de marcas incluye los refrescos Coca-Cola, Tropical y Sprite, además de las cervezas nacionales Salva Vida, Barena e Imperial.
La operación representa el 3,5% del Producto Interno Bruto nacional y alrededor del 21,7% del PIB manufacturero del país. El Consejo Hondureño de la Empresa Privada (Cohep) estimó que por cada día de huelga, el Estado de Honduras dejó de percibir 16 millones de lempiras (HNL) en ingresos fiscales, unos US$631.187.
En dos publicaciones por X, Karim E. Qubain, presidente de la Cámara de Comercio e Industrias de Cortés (CCIC), reconoció a todas las partes por lograr un acuerdo “que permite la reactivación de las operaciones de las plantas de producción de la Cervecería Hondureña”.
El empresario también resaltó el papel del secretario Fernández en la intermediación y en la firma del contrato colectivo por medio del diálogo. “Felicidades a todas las partes. Se salvan empleos y se beneficia a la economía del país”.
Días atrás, el 12 de diciembre, el STIBYS y Embotelladora La Reyna, consorcio transnacional CBC-PepsiCo, firmaron el nuevo convenio colectivo que tendrá una vigencia de dos años. La negociación se basó sobre una propuesta que incluía 64 cláusulas.
