Bloomberg Línea — El presidente de El Salvador, Nayib Bukele, aseguró que las pandillas en el país están “operativamente desarticuladas”. Además, anunció que presentará un proyecto en el Congreso para que el presupuesto nacional de 2025 esté “completamente financiado” con recursos propios.
“Las pandillas están operativamente desarticuladas, pero eso no quiere decir que todavía no hay enemigos a vencer. Quizá el más grande de todos es cambiar nuestra forma de ser, de entender y de actuar en esta nueva realidad”, dijo Bukele en su discurso para conmemorar los 203 años de Independencia de El Salvador, brindado en Ciudad Arce frente a 18.000 uniformados del Ejército, el 15 de septiembre.
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El discurso de Bukele asegurando que en los últimos convirtió al “país más peligroso del mundo en el país más seguro de todo el hemisferio occidental” contrasta con un informe de la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH) que evidencia la violación sistemática de derechos humanos en el contexto de la lucha contra las pandillas en el país desde 2022.
Aunque la política de seguridad de Bukele, basada en un régimen de excepción que se ha prorrogado en 30 ocasiones desde marzo de 2022 es un modelo a seguir para mandatarios, el documento publicado por la CIDH el pasado 4 de septiembre expone casos de tortura y desaparición forzada, por ejemplo.
Entre los patrones identificados por la CIDH en las alrededor de 73.000 detenciones ejecutadas por las autoridades salvadoreñas sobresale la ausencia de órdenes judiciales para la privación de la libertad de los supuestos pandilleros y la ausencia de flagrancia. Pero también el “uso de criterios discriminatorios” para justificar los arrestos, entre ellos, la condición socioeconómica.
Un presupuesto “completamente financiado” para 2025
Aunque la guerra contra las pandillas ha hecho de Bukele uno de los presidentes latinoamericanos con mayor aprobación, la economía sigue siendo uno de los mayores reparos a su Gobierno, de ahí que en este quinquenio busque “sanarla”, como afirmó en su discurso.
En ese contexto, dio a conocer que presentará ante el Congreso un proyecto para que el presupuesto nacional de 2025 sea “completamente financiado” por el país.
“Anuncio que para este 30 de septiembre presentaremos ante la Asamblea Legislativa, por primera vez en décadas, el primer presupuesto completamente financiado, sin la necesidad de emitir un solo centavo de deuda para gasto corriente”, expuso.
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Y agregó: “El Salvador ya no gastará más de lo que produce anualmente, ni siquiera vamos a prestar dinero para pagar los intereses de las deudas que nos heredaron. Hasta eso lo pagaremos de nuestra propia producción”.
El país, sin embargo, sí adquirirá una deuda para la construcción del Aeropuerto Internacional del Pacífico y el despliegue de un cable de fibra óptica submarino, proyectos para los que el Banco de Desarrollo de América Latina y el Caribe (CAF) aprobó un crédito de US$465 millones el pasado 18 de julio, aunque hasta el momento se desconocen las condiciones.
Para la construcción del aeropuerto, el CAF desembolsará US$320 millones, aunque el Gobierno también destinará parte de este rubro para remodelar el aeropuerto de Ilopango y construir el Aeródromo de Tonalá. Entretanto, US$145 millones serán para el despliegue del primer cable submarino para mejorar el acceso a internet.
