El presidente de Ecuador, Guillermo Lasso, en un mensaje a la nación rechazó este jueves el juicio político en su contra e insistió en su inocencia. Asimismo, adelantó que se defenderá del intento de impeachment “que huele muy mal”. Con esto, la posibilidad de decretar la “muerte cruzada” y disolver el parlamento quedaría descartada.
“Soy un demócrata que cree que la democracia se fortalece con más democracia, por tanto, respeto la decisión de la Corte Constitucional, aunque no la comparto”, declaró en su mensaje que fue televisado y también transmitido en redes sociales. Allí ratificó, además, ser “inocente” y siempre haber “actuado con recta intención”.
A decir de Lasso, el intento de enjuiciarlo políticamente pretende “asesinar mi reputación y la de mi hogar” y es un “intento desesperado, atemporal y violento de robarle” estabilidad a los ciudadanos.
De allí que advirtió: “Debo defender mi nombre y el nombre de mis hijos, el de mis nietos, de mi esposa y de todos quienes componen nuestro hogar, debo defender el buen nombre de nuestro hogar”. A decir del jefe de Estado, “está viviendo un ataque sistemático y mafioso” y pretenden “enlodar mi nombre y el de mi hogar”.
Lasso considera que algunos asambleístas “se han inventado un juicio político porque buscan el poder de manera desesperada, sin límites y por fuera de los tiempos que establece la democracia”.
Respecto a la acusación por peculado, el presidente la calificó de “absurda”, pues “me acusan presuntamente de abusar de fondos públicos para beneficio propio cuando aún no era presidente de la República, ¿cómo es posible?, ¿qué tengo que ver con un contrato del 2018? Ni siquiera existe una investigación en Fiscalía sobre este tema”.
La acusación señala que Lasso permitió que se firme un contrato en la empresa Flopec a pesar de que habría sabido que era lesivo para el Estado por un examen de Contraloría y una alerta del gerente de esa empresa naviera estatal.
Luego de que la Corte Constitucional admitiera el enjuiciamiento, la Comisión de Fiscalización de la Asamblea deberá tratar el tema y elaborar un informe que luego deberá ser votado por el Pleno del parlamento. Se necesitan de 92 votos para destituir al presidente.
