Bloomberg Línea — El nuevo presidente de Ecuador, Daniel Noboa, asignó este viernes a la vicepresidenta Verónica Abad “como única función” ser “colaboradora para la paz y precautelar el escalamiento de la conflictividad entre Israel y Palestina”.
Para cumplir estas funciones, la vicepresidenta estará en la oficina de la Embajada del Ecuador, en Tel Aviv, según se oficializó mediante la suscripción del decreto ejecutivo 27.
En un comunicado de la Secretaría de Comunicación de la Presidencia (Segcom) se informó que la decisión “representa un hito histórico, que marca un precedente sobre el significativo compromiso del Ecuador con la paz internacional” y su compromiso para promover los esfuerzos por alcanzar la estabilidad en una región afectada por conflictos prolongados.
A través de un posteo en redes sociales, la Embajada de Israel en Quito agradeció al gobierno ecuatoriano “el esfuerzo y el interés de mediar por la paz del pueblo de Israel”.
La nueva asignación de Abad, de 47 años, ha causado revuelo en el país, en medio de especulaciones de una supuesta mala relación con el presidente Noboa, que se originó en el último tramo de la campaña presidencial.
En redes sociales se viralizaron declaraciones de Abad en pro de la privatización de la educación y la salud, por lo que varios analistas consideran que Noboa decidió alejarla de la Vicepresidencia.
Al ingreso a la Asamblea Nacional para asistir a la ceremonia de cambio de mando, un periodista le preguntó a Abad si tiene buena relación con Noboa y ella respondió con un “sí”.
Sin embargo, tras la ceremonia de mando, se observó un distanciamiento entre ambas autoridades. El presidente Noboa se trasladó al Palacio de Carondelet, para presidir un almuerzo protocolario con alrededor de 600 invitados, del que Abad no fue parte.
En cambio, la vicepresidenta se dirigió al mercado Iñaquito, localizado en el norte de Quito, para almorzar con trabajadores y vendedores del centro de abastecimiento.