Bloomberg Línea — Tras la declaratoria de ‘muerte cruzada’ en Ecuador por parte del presidente Guillermo Lasso, algunos mandatarios y líderes políticos de América Latina hicieron público este miércoles su posición ante la situación que atraviesa el país.
El presidente de México, Andrés Manuel López Obrador, consideró que no habrá inestabilidad política o violencia en Ecuador, “además no lo deseo. Ojalá y los hermanos ecuatorianos puedan resolver esto con este procedimiento, si se va a convocar a nuevas elecciones, pues que participen todas las fuerzas políticas”.
Sin embargo, el mandatario mexicano dijo durante su rueda de prensa matutina que su Gobierno estará pendiente ante posibles “enfrentamientos” y aseveró que la embajadora mexicana en Ecuador, Raquel Serur, “seguramente está atendiendo” a los mexicanos en dicho país.
Además, el portavoz del Departamento de Estado de Estados Unidos, Vedant Patel, aseguró que la relación del país con el Gobierno de Ecuador permanece “fuerte” y se rehusó a comparar la situación de Ecuador con la de Perú.
El portavoz explicó que el Gobierno de Joe Biden está “al tanto” de la decisión de Lasso, al tiempo de ofrecer su apoyo a “las instituciones y a los procesos democráticos de Ecuador”, y expresó su respeto “a la voluntad del Gobierno y del pueblo ecuatoriano”.
En tanto, la Presidencia del Perú expresó en un mensaje difundido por redes sociales su respaldo a Ecuador y aseguró que Lasso ejerció “sus funciones constitucionales” al decretar la disolución del Parlamento y convocar elecciones generales anticipadas, en medio del juicio político en su contra.
“Respetamos la decisión adoptada por el presidente Guillermo Lasso dentro del marco constitucional. Abogamos para que el próximo proceso electoral en la hermana República de Ecuador se lleve a cabo dentro de los cauces legales, en paz y en democracia”, dijo la presidencia en un tuit.
Por esa misma red social, Evo Morales, expresidente de Bolivia y afín a la ideología del expresidente Rafael Correa, habló del tema y calificó de “doble moral” la decisión del presidente ecuatoriano, al recordar que “hace cinco meses acusó de golpista al hermano Pedro Castillo, que hizo lo mismo pero para frenar una conspiración”.
El líder político aseguró que la figura constitucional usada por Lasso fue “solo una excusa” para librarse de un proceso por presunta corrupción.
El ministro de Relaciones Exteriores de Paraguay, Julio Arriola, también se refirió al conflicto y mencionó que la política exterior de su país se centra en la no intromisión de los asuntos internos de otros Estados.
“La posición que va a tomar el Paraguay siempre en su política exterior es la de respeto a la democracia, los derechos humanos y la no intromisión de los asuntos internos de otros Estados”, dijo el funcionario.
La figura de la ‘muerte Cruzada’ fue incorporada en la Constitución de 2008 durante la administración de Correa, y es una cláusula establecida en al Carta Magna con la que se disuelve la Asamblea Nacional para convocar posteriormente a elecciones, con el fin de renovar los poderes Legislativo y Ejecutivo.