Bloomberg Línea — El presidente ecuatoriano, Daniel Noboa, informó este miércoles que comenzará a deportar 1.500 presos extranjeros a Colombia en medio de la grave crisis carcelaria que enfrenta ese país andino y que provocó una ola de violencia.
“De acuerdo a la ley ecuatoriana y los tratados internacionales, podemos sacar a esos 1.500 y dejarlos en la frontera y muchas gracias y quédense por allá”, dijo el mandatario ecuatoriano.
El ministro de Justicia colombiano, Néstor Osuna, respondió que Colombia sí recibirá a los presos expulsados de las cárceles ecuatorianas, haciendo la diferenciación con el proceso de repatriación, sobre el cual ha manifestado sus preocupaciones.
“Si es una expulsión, pues quiere decir que simplemente llegan a la frontera y ya dependerá de la situación de cada uno de ellos frente a la justicia colombiana (...) Si usted me pregunta si en la cárcel de Ipiales hay 1.500 cupos, por supuesto que no. Si hay una expulsión, miraremos si las personas deben ser capturadas y pasar a disposición de un juez”, agregó.
En medio de la crisis carcelaria que afronta Ecuador, el Gobierno de Daniel Noboa declaró la existencia de un “conflicto armado interno” y anunció operaciones militares.
En días pasados, su Administración también declaró el estado de excepción durante 60 días por grave conmoción interna, incluidas las cárceles, y ordenó el toque de queda entre las 23:00 y 05:00 en el territorio nacional.
En el marco de estas acciones, el Gobierno ecuatoriano también ha anunciado el plan de deportar a los presos extranjeros para liberar las cárceles del país, especialmente a Colombia.
Luego de la toma a la sede del canal TC Televisión por un grupo criminal y los hechos de violencia presentados en diferentes ciudades del país, el Gobierno de Colombia expresó su “explícito e inequívoco respaldo a la institucionalidad democrática y al Estado de derecho” de Ecuador.
La Cancillería del país rechazó los hechos de violencia desatados en varias ciudades ecuatorianas y expresó su solidaridad con los afectados.
“Hace votos para que se estabilice la situación de seguridad, se restablezca el orden público, expresa su apoyo al Gobierno y al pueblo de Ecuador y manifiesta su solidaridad con sus legítimas autoridades”, indicó el Twitter la Cancillería colombiana.
“Colombia dijo que nos querían ayudar y yo dije perfecto, ya les mandamos los 1.500 presos que los tenemos manteniendo en cárceles ecuatorianas”, indicó Noboa en una entrevista.
El Gobierno colombiano también ha manifestado sus reparos frente al plan de deportación de presos, al considerar que no se puede hacer de forma masiva y que se debe analizar caso por caso.
“Se requiere que la solicitud la haga la persona privada de la libertad, no es una iniciativa gubernamental”, dijo Néstor Osuna.
Señaló que si bien la repatriación de presos se contempla en el derecho internacional y es una práctica cotidiana de las autoridades, “siempre se deciden caso por caso, uno a uno”.
Explicó además que se requieren unas condiciones especiales, como que el preso haya pagado más de la mitad de la pena y el que las autoridades colombianas hagan las correspondientes verificaciones.
Dijo que el año pasado Colombia recibió de Ecuador diez solicitudes de repatriación de personas privadas de la libertad, de las cuales se aprobaron siete.
“Una situación masiva como la que ha publicado el Gobierno del Ecuador nunca ha ocurrido”, afirmó.
Osuna confirmó el martes que el Gobierno recibió una comunicación escrita y formal de la ministra de Asuntos Exteriores del Ecuador sobre la deportación de los presos y que ya ha hablado con ella.
Al respecto, expresó que hay “plena disposición de cooperar en una situación que puede tener un talante humanitario”, para que los colombianos condenados en Ecuador puedan pagar la pena en una cárcel cerca de su entorno familiar.
“Entendemos la situación, pero nuestra legislación, con todo el ánimo de colaboración que tenemos, nos obliga a estudiar casos por caso y mirar en cuáles procede y en cuáles no. (…) Esa repatriación es voluntaria”, finalizó Osuna.
En todo caso, reconoció que el Gobierno estaría dispuesto a abreviar el proceso en caso de que se requiera.
“Estamos atentos a todo el apoyo que el Gobierno del Ecuador nos solicite”, había manifestado el martes el presidente colombiano, Gustavo Petro, en su cuenta de X.