Bloomberg Línea — El ministro de Energía y Minas de Ecuador, Antonio Gonçalves, reapareció en la mañana de este 24 de septiembre para dar una buena noticia en medio de la crisis energética que vive el país, pero también para explicar cuál será el proceder del Gobierno en los próximos días y las próximas semanas en torno a esta situación.
Gonçalves, en conferencia de prensa, informó que el embalse Mazar recuperó 1,60 metros de agua, en buena medida gracias a los apagones adelantados a nivel nacional y al apoyo de la hidroeléctrica Coca Codo Sinclair, donde ha estado lloviendo.
La ‘buena nueva’ no es menor si se tiene en cuenta que Mazar hace parte del principal complejo hidroeléctrico del país, Paute, que en óptimas condiciones tiene la capacidad de garantizar el 38% de la demanda nacional de energía.
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De hecho, apenas un día atrás, Gonçalves aseguró que, si Mazar llegaba a los niveles de 2.110 metros sobre el nivel del mar, ni siquiera los racionamientos de energía iban a permitir tener control sobre la crisis energética.
“Cuando llega a 2.110 metros, perdemos el control sobre el sistema energético nacional y a partir de ese momento dependemos exclusivamente de lo que llueva”, apuntó.
Entre las medidas a corto plazo para garantizar el suministro de energía a los hogares ecuatorianos, sobresale la contratación de 341 megavatios, de los cuales 100 ya están operando mediante una barcaza en el río Guayas y, a mediano plazo, de 800 megavatios, que llegarán en marzo de 2025.
Ecuador además ha estado comprando energía de Colombia, aunque el suministro se redujo por cuenta de un decreto del Gobierno del vecino país que permite exportar solo los excedentes de fuentes térmicas.
A estas acciones, se suma la búsqueda de contratar 1.200 megavatios más de energía, producida justamente con fuentes térmicas, lo que aliviaría la operación en las embalses, según el ministro.
Ahora bien, para decidir cuáles y cómo serán los cortes de luz en la próxima semana, las autoridades gubernamentales se reunirán el jueves, 26 de septiembre.
Gobierno insiste en que crisis es producto de la sequía
Antonio Gonçalves insistió en que la crisis que vive el país es producto de la sequía, la peor en 61 años, problemática que además están padeciendo otros países de la región.
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“El comportamiento estadístico y la data histórica demuestran que estamos en una situación grave de sequía regional y mundial”, aseguró el jefe de la cartera de Energía, haciendo eco a las declaraciones del presidente Daniel Noboa durante un evento en el marco de la Asamblea General de la ONU.
Muestra del impacto de la sequía es que el estiaje, es decir, el nivel más bajo de los cuerpos de agua, que en Ecuador estaba pronosticado para diciembre, se adelantó tres meses, conforme con Gonçalves.
En ese contexto, aprovechó para brindar un mensaje de tranquilidad: “Al igual que ustedes estamos muy preocupados, acongojados por esta situación. Quiero darles esa seguridad que este Gobierno del presidente Noboa y sus Ministros están enfocados en el bienestar de ustedes y queremos superar esta crisis juntos lo más pronto posible”.
