Bogotá — Las ventas de los productos de cannabis medicinal no han alcanzado las expectativas que tenían las empresas ante aspectos que van desde retrasos en los registros, permisos, mecanismos de bancarización y otros temas regulatorios, informó este lunes la Asociación Nacional de Comercio Exterior (Analdex).
Los exportadores señalan que “las ventas externas de cannabis de uso medicinal han tenido trabas y se han visto considerablemente afectadas”.
Los empresarios del sector se refieren puntualmente a los retrasos en los registros con el Instituto Nacional de Vigilancia de Medicamentos y Alimentos (Invima).
Además, advierten sobre presuntas demoras en los procesos del Fondo Nacional de Estupefacientes.
Según indican, en esta entidad “pueden tardar entre 2 y 3 meses para aprobar una certificación de exportaciones para los productos fitoterapéuticos”, advirtió el director de Asuntos Regulatorios de FCM Global, Diego Ruiz.
Esta empresa del sector produce aceites, extractos y aislados de cannabis y que exporta a Perú, Ecuador, Brasil, Argentina, Alemania, Bélgica, Reino Unido y Uruguay.
Ante esta situación, el presidente ejecutivo de Analdex, Javier Díaz Molina, dice que “debe haber una mayor celeridad y disposición del Gobierno para que el cannabis medicinal sea un actor relevante en esa búsqueda de diversificación de la canasta exportadora del país”.
Además, “hay que seguir trabajando en los mecanismos de bancarización, ya que se carece de una adecuada oferta de inclusión al sistema financiero, debido a múltiples factores de estas industrias denominadas sensibles en términos de riesgo”, complementó el gerente regional de Antioquia de Analdex, Rodrigo Patiño.
“Para este sector tener una cuenta bancaria que permita el reintegro de divisas es toda una odisea y se tienen que hacer grandes esfuerzos e inversiones en materia de cumplimiento para no perderla. Nada se gana si se vende al exterior y no tenemos como traer las divisas”, apuntó.
El año pasado, las exportaciones del sector alcanzaron los US$9,6 millones, un aumento del 89,1% frente a 2021.
No obstante, Analdex dice que “esta cifra está lejos de las proyecciones que tenían las compañías exportadoras”.
Entre los países que más demanda tuvieron de cannabis de uso medicinal colombiano en 2022 figuran Argentina con US$3,8 millones, seguido por Brasil (US$1,3 millones), Australia (US$1,3 millones), Alemania (US$649.640), Suiza (US$595.549) y Estados Unidos (US$552.754).
Colombia espera exportar entre US$1.733 millones y US$2.599 millones en el escenario más optimista en productos de cannabis medicinal al 2030, según información de la agencia gubernamental ProColombia.
La proyección de exportaciones de US$1.733 millones al 2030 se realiza con base a un escenario de precios internacionales intermedio de cannabis medicinal de US$2.000 por kg de extracto.
Mientras que la proyección más optimista se realiza bajo un escenario de precios de US$3.000 por kg de extracto, de acuerdo a cálculos de ProColombia, con información del Departamento Administrativo Nacional de Estadística (Dane) y el centro de pensamiento Fedesarrollo.
En entrevista con Bloomberg Línea en diciembre, el presidente de la Asociación Colombiana de Industrias de Cannabis (Asocolcanna), Miguel Samper Strouss, manifestó que en esta Administración “indudablemente hay un cambio de voluntad y hay un cambio de tono, de discurso y de narrativa” frente al cannabis.
Pero matizó que la industria está en cuidados intensivos y “ya han tenido que cerrar operaciones 400 empresas, es decir la tercera parte de la industria ya cerró”.
“Los pequeños productores no han podido entrar a competir porque necesitan muchas inversiones”, indicó.
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