Bogotá — Este viernes será clave para la economía colombiana de cara al 2025. El nuevo ministro de Hacienda, Diego Guevara, debuta en la Junta del Banco de la República con el reto inclinar la balanza hacia una reducción de tasas de interés más acelerada.
VER MÁS: Retos de Diego Guevara en MinHacienda para la recta final del mandato de Petro
Durante las reuniones del 2024 la Junta ha coincidido en la necesidad de bajar los tipos de intervención, pero no ha sido posible ponerse de acuerdo en el ritmo al que se debe hacer.
Por ahora la mayoría ha estado inclinada por la cautela. Se han hecho recortes de 50 puntos básicos, aunque un sector minoritario ha pedido hacer reducciones de 75 puntos.
En la más reciente reunión la votación quedó 4-3, por lo cual Guevara llegará a la reunión de política monetaria con el reto de convencer a uno más de los codirectores para que el nuevo round permite acelerar el ritmo.
Inflación sigue lejos de la meta
En marzo de 2023 la inflación alcanzó su techo en 13,3% y desde el mes siguiente comenzó a ceder. Desde entonces han pasado 20 meses y aunque la inflación sigue en la dirección correcta, aún está 220 puntos básicos por encima de la meta establecida por la autoridad monetaria.
Hay que tener presente que le Emisor colombiano tiene establecida una meta de inflación del 3% con margen de movimiento de un punto porcentual hacia arriba o hacia abajo.
A finales del mes pasado la Junta del banco central confirmó el 3% como su meta para 2025, pero enfatizó en la necesidad de que el incremento salarial esté alineado con el propósito de reducir la tasa de inflación.
“La reducción de la inflación se facilita si quienes determinan precios y salarios incorporan en sus decisiones la reducción esperada de la inflación y su convergencia hacia la meta”, dijo el Emisor.
VER MÁS: Diego Guevara será el nuevo ministro de Hacienda de Colombia
Hay que tener presente que codirectores como Bibiana Taboada y Mauricio Villamizar han enfatizado en la necesidad de que el salario mínimo del próximo año esté en línea con el objetivo de inflación.
Tras la derrota de Gustavo Petro en el Congreso de la República con la Reforma Tributaria, el presidente aseguró que el salario mínimo del próximo año compensará a los trabajadores si el poder legislativo no aprueba la reforma laboral que presentó el Gobierno y que hace carrera.
Proyecciones de inflación
El mercado financiero tiene proyectado que la inflación de diciembre sea de 0,41%, es decir, levemente menor a la de diciembre de 2023 cuando fue de 0,45%.
Si se cumpliera con la estimación del mercado, la inflación de todo 2024 terminaría en 5,16% y esa sería la base para determinar el incremento salarial del próximo año.
En la negociación se suele sumar a la inflación un punto por productividad laboral, lo que podría significar un incremento del 6,16%. No obstante, varios expertos consideran que se buscará una cifra redonda, como podría ser un salario mínimo de COP$1.400.000, lo cual significaría un aumento del 7,7%.
Sin embargo, con una inflación de 5,1% es complicado pensar en un aumento de 7,7% porque han sido varias las advertencias sobre la inconveniencia de subir el salario muy por encima de la inflación.
En 2023 con inflación de 9,1% el salario se incrementó en 12,1%, es decir, tres puntos porcentuales por encima del IPC, de ahí que la inflación haya bajado a un ritmo más lento que en otros países de la región.
El plazo para definir el salario de 2025 será el 30 de diciembre y tendrá que expedirlo por decreto el Gobierno de Gustavo Petro a menos que las centrales obreras y el sector empresarial alcancen un acuerdo sobre el nivel incremento.
VER MÁS: ¿PIB en tercer trimestre le da la razón a Petro o al Banco de la República?