Nuevo rifirrafe entre Ecopetrol y la USO: ¿se está cumpliendo la convención colectiva?

El Mintrabajo adelantó un encuentro con Ecopetrol y la USO, su sindicato más grande, para hacerle seguimiento a denuncias de presuntos despidos injustificados que hizo el sindicato y a los acuerdos de la Convención Colectiva

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Un nuevo rifirrafe se cocina entre Ecopetrol (ECOPETL) y la Unión Sindical Obrera de la Industria del Petróleo (USO), su sindicato más grande. La razón: despidos presuntamente injustificados y el cumplimiento de los acuerdos suscritos en la firma de la Convención Colectiva.

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Este miércoles ambas partes se reunieron con la ministra del Trabajo, Gloria Inés Ramírez, para hacerle seguimiento a estos asuntos. Encuentro que se suma a uno previo que hubo entre la organización sindical y el presidente de la estatal colombiana, Ricardo Roa Barragán.

Al respecto, César Loza, presidente de la Unión, expresó que la oficina de ética y cumplimiento de Ecopetrol “no puede seguir montando expedientes de manera fraudulenta” y que “se debe garantizar el debido proceso”. Lo anterior, haciendo referencia a un caso en el que la Rama Judicial falló improcedente una tutela que la petrolera instauró contra un laudo arbitral que ordenó el reintegro de un dirigente sindical.

Y es que recordemos que en la nueva Convención Colectiva de Trabajo, que tiene una vigencia de cuatro años que empezaron a contarse en enero de 2023 e irán hasta el 31 de diciembre de 2026, se acordó mejorar las condiciones laborales de lo trabajadores, el compromiso de seguir promoviendo la diversidad y la inclusión con enfoque de género, con criterios de razonabilidad, austeridad y eficiencia.

Además de la asignación de recursos para proyectos de inversión social conjuntos y para la transición energética.

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Por otro lado, acaba de crearse Amigos de Ecopetrol, una asociación conformada por los accionistas minoritarios de la organización, y quienes también tiene críticas frente a la dirección de la empresa. Lo anterior sucedió luego de la asamblea ordinaria que tuvo lugar el pasado 22 de marzo.

El objetivo es “defender los intereses de los pequeños accionistas, como es obvio, y a la empresa y a todos los colombianos, hoy maltratados y en mayores riesgos por las posiciones del falso ambientalismo del presidente Gustavo Petro”, indicó el exsenador y excandidato a la Alcadía de Bogotá, Jorge Enrique Robledo.

Los reparos a la gestión de la petrolera

Para la Unión Sindical Obrera es necesario mejorar los recursos destinados en el plan de inversiones para aumentar la producción de campos maduros.

Recordemos que a finales del año pasado la USO expresó su preocupación por la baja incorporación de reservas y a la reposición de las mismas. Por lo que propusieron que el Gobierno, en cabeza del Ministerio de Minas y Energía, Ecopetrol y los sindicatos elaboren, con rigurosidad técnica, un plan de exploración y explotación, que incluya técnicas de recobro mejorado.

Lo anterior para que se permita: por un lado, subir la producción, y por el otro, incorporar reservas porque “las reservas que en este momento tiene Ecopetrol dan para un poco más de siete años y medio y se debe garantizar la autosuficiencia y autosoberanía energética”, dijo Loza.

En ese sentido especificó que en el país hay que recuperar el factor de recobro, que está entre 19% y 20%, para subir algunos puntos, cuatro o cinco.

Adicional a eso, el presidente de la USO detalló que de los 737.000 barriles de crudo diarios en promedio de producción que reportó Ecopetrol en 2023, 89.000 barriles pertenecen al Permian, que hacen parte de un contrato de Ecopetrol (con el 49% de participación) y Oxy (con el 51% de participación) para hacer fracking en Estados Unidos. “Son recursos que se llevan para fuera del país y que no garantizan empleo local ni desarrollo social en Colombia”.

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El dirigente sindical sumó otro reparo, relacionado con el gas. Explicó que tres pozos que se perforaron en el Casanare salieron secos, y que tuvieron un costo aproximado de entre US$250 millones y US$300 millones.

No obstante, Ecopetrol anunció que el pozo Orca Norte–1, cuya perforación se inició en noviembre pasado y finalizó de manera exitosa en enero, comprobó la presencia de dos acumulaciones de gas en reservorios diferentes al descubrimiento Orca-1, lo cual activa una reevaluación del proyecto original, a la vez que amplía el potencial de gas de La Guajira Offshore.

Orca Norte-1 fue el primer pozo en aguas profundas operado 100% por la estatal colombiano, que ha indicado que tiene uno de los mejores desempeños operacionales de los pozos del Caribe colombiano y sin incidentes que afectaran a personas o al medio ambiente.