Bogotá — Linda Yaccarino, que ejercía como jefa de publicidad de NBCUniversal, se convirtió en la nueva directora ejecutiva de Twitter, menos de un mes después de que intercambiara visiones sobre la tecnología y los negocios en una entrevista con el magnate sudafricano Elon Musk, propietario de la firma tecnológica.
A mediados de abril, ambos compartieron set en una entrevista para NBCUniversal en el marco del evento POSSIBLE Miami Event 2023 de MMA, en la que Linda Yaccarino dejó ver ciertas diferencias frente a las políticas que ha tomado el millonario Musk, que en octubre concretó la compra de Twitter por $44.000 millones.
Elon Musk, considerado el segundo hombre más rico en la actualidad con una fortuna de US$$168.000 millones, inició una serie de transformaciones en la estructura de la compañía y en este contexto cuatro quintas partes del personal ya abandonó la empresa.
La entrevista, de un poco más de 40 minutos, comenzó con Yaccarino hablando sobre el paso de Musk de una faceta de invención con sus otras compañías como Tesla a una de reinvención con Twitter, lo que implicaría desafiar el legado, según dijo.
En la conversación, hubo puntos de debate, especialmente en lo referente a la influencia de los anunciantes en la plataforma.
Yaccarino, que durante 20 años (desde enero de 1992 hasta noviembre de 2011) trabajó en el conglomerado de medios Turner, se refirió a la importancia de que se restablezca un “Consejo de influencia” en Twitter para mantener el diálogo entre los anunciantes y los voceros de la empresa.
“En realidad, fue un ciclo de retroalimentación recurrente de sus partes interesadas clave, sus anunciantes, donde tenían acceso recurrente a ustedes. ¿Se comprometería a restablecer ese consejo?”, le cuestionó.
No obstante, el millonario sudafricano dijo que le preocupa que esto pudiera provocar una reacción negativa del público.
“Si el público piensa que sus puntos de vista están siendo determinados por un pequeño número de CMO en EE.UU estarían molestos por eso, pero creo que la retroalimentación es apropiada”.
Musk señala que quiere centrarse en el contenido relevante y defendió los controles que se han adoptado para eliminar los discursos de odio dentro de la plataforma y aislar a los anunciantes de sus efectos: “Disney se ha mantenido como un anunciante importante, literalmente anuncian programas para niños en Twitter, y no lo harían si estuviera lleno de discursos de odio”.
Explicó que para combatir los discursos de odio y que la plataforma realmente recomiende lo que las personas quieren, publicarán el algoritmo de Twitter como código abierto. “Creo que es el único camino para confiar, no creo que haya otro”.
Según el directivo, las etiquetas para controlar estos contenidos aplicarán también para sus tuits. “La gente no va a confiar en Twitter si hay reglas diferentes para mí, o para otros en comparación con el resto de la plataforma. (…) Todo lo que se aplica al resto de Twitter, debe aplicarse a mí”.
La nueva CEO de Twitter, Linda Yaccarino, fue vicepresidenta ejecutiva, directora de operaciones (COO) de Ventas de Publicidad y encargada de Marketing y Adquisiciones en Turner y durante su gestión en NBCUniversal desempeñó un papel importante en el lanzamiento del servicio de streaming con publicidad Peacock y en la supervisión de grandes eventos como el Super Bowl y los Juegos Olímpicos. También dirigió asociaciones con varias empresas tecnológicas, como Snapchat, YouTube y Twitter.
Separar a Musk de sus opiniones y el poder que tiene
Yaccarino comentó que todavía hay personas a quienes les cuesta separar al hombre, sus opiniones y al micrófono que ahora posee, en relación a las opiniones de Elon Musk y a la adquisición de Twitter.
Al respecto, Musk aseguró que es “difícil transmitir el tono” en un tuit, “así que algo que puede ser sarcástico o una broma o algo así puede parecer serio cuando no lo es. Pero gran parte del problema es la amplificación negativa en los medios”.
“Es importante tener en cuenta que los medios tradicionales son un competidor de Twitter. Compiten por los dólares de la publicidad”, agregó el empresario, a lo que Linda Yaccarino replicó que mucha gente piensa que esta posición podría considerarse como demasiada provocativa al requerírsele un mayor estándar por ser el propietario de la tecnológica.
“Hay varias organizaciones de noticias a las que no les gusta su impulso por la democratización”, complementó Yaccarino, refiriéndose también al malestar en el sector por las insignias de verificación y las políticas de cobro.
“Creo que es muy importante para elevar el periodismo ciudadano, es muy importante escuchar la voz de la gente, su voz real, dejar que la gente elija la narrativa y determine la verdad”, le contestó Musk.
Los planes de Musk con Twitter
Musk dijo que está tratando de hacer de Twitter una plataforma que sea divertida, interesante e informativa: “Twitter es efectivamente un acelerador de una idea que he tenido durante mucho tiempo, lo llamo una especie de X, la aplicación de todo, una plataforma que es tan útil que encuentras que es esencial”.
Eso incluye los pagos, un sistema de mensajes directos que ofrezca llamadas de voz y videollamadas encriptadas, entre otros. “Podrás comprar cosas directamente en Twitter con un clic”.
Yaccarino lo cuestionó acerca de cómo encaja la visión de Twitter 2.0 en la sociedad actual y el rol que la tecnológica cumple, a lo que Musk contestó que sus esfuerzos apuntan a que “la civilización avance”.
“Tenemos que tener libertad de expresión. Es más importante de lo que piensas. Es ese tipo de cosas que no sabes que te estás perdiendo hasta que no lo tienes y en muchos lugares la gente no lo tiene”, dijo el empresario.
“La naturaleza de la libertad de expresión es la prueba de fuego para esto, que las personas que no te agradan puedan decir cosas que no te gustan, de lo contrario no es gratis”, ahondó.
“Si perdemos eso, perdemos los cimientos de la democracia”, apuntó.
Yaccarino también llamó la atención sobre las nuevas políticas de Twitter justamente con relación a la libertad de expresión. En Twitter, estas políticas se sustentan ahora bajo la premisa de que libertad de expresión “no significa libertad de alcance”.
Al respecto, el empresario dijo que no van a recomendar contenido de odio para la gente y que van a poner una etiqueta en la que se advierta que un determinado discurso probablemente no es al que las personas quieren acceder.
“Si la gente dice cosas que te entristecen o te alientan la negatividad, no vamos a amplificarlo. Twitter lo ha hecho en el pasado”, apuntó.
La entrevistadora quizó ahondar en la pregunta y saber específicamente en qué se diferencian estas políticas con las de las demás redes sociales.
El propietario de Twitter se limitó a decir que simplemente no las usa. “Antes de la adquisición de Twitter no encontré las otras plataformas convincentes, objetivamente”.
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