Bogotá — Fueron dos meses de reuniones en Abu Dabi y una crucial en Madrid la semana pasada, en donde se selló el trato. La familia Gilinski pujó por año y medio para controlar el Grupo Sura y el Grupo Nutresa, pero al final prefirieron quedarse con el 87% de Nutresa, un solo activo, y una de las joyas del llamado Grupo Empresarial Antioqueño (GEA).
Bloomberg Línea conoció más detalles de uno de los acuerdos más grandes en la historia empresarial colombiana que involucró por más de año y medio a los multimillonarios caleños Jaime y Gabriel Gilinski, y unas de las empresas más destacadas de origen antioqueño
Para llegar ahí tuvieron que escoger en la mesa de negociación entre Bancolombia y Nutresa, y la familia Gilinski se decidió por la segunda, según dos fuentes cercanas a la negociación. Parte del acuerdo también incluyó cesar todo tipo de acciones legales.
Cabe recordar que tanto el GEA como Gilinski habían pasado la batalla del campo empresarial a los estrados judiciales donde había más de una decena de procesos tanto en el contencioso administrativo, como en el mundo penal, y en las superintendencias para controvertir OPAS, conformación de juntas directivas e incluso dudosos repartos judiciales. Entre esas decisiones que se esperaban estaba la de las superintendencias de Sociedades y Financiera sobre si Sura, Argos y Nutresa eran un grupo empresarial.
Este medio pudo establecer que, aunque desde el inicio de la toma hostil se habló del interés por Bancolombia, al final los banqueros del GNB Sudameris prefirieron la compañía de alimentos, aunque ello les costara quedar sin el control del banco más grande del país.
El hecho se definió hace dos semanas en una reunión clave en Madrid, España, a donde las partes llegaron sin un acuerdo claro y en la cual los voceros del GEA les pusieron sobre la mesa la opción a los Gilinski: se quedan con Bancolombia o con Nutresa, pero no con las dos.
Personas cercanas a la negociación contaron que a pesar de que sí existía interés por controlar Bancolombia, y eventualmente unirlo con el GNB Sudameris, para los empresarios caleños resultaba mejor negocio quedarse con Nutresa y potenciarla con las compañías de su socio árabe, con lo que esperan, se abran nuevos horizontes de negocio.
De acuerdo con los datos más recientes de la compañía, Nutresa al término de marzo pasado reportó que el ebitda crece a un nivel superior a las ventas, con un incremento de 38,2%, y registra un valor de $647.058 millones. Sus ingresos por su parte, aumentaron 49,1% a $2,1 billones, mientras que sus utilidades trimestrales mostraron un aumento del 16%.
Estimaciones durante la negociación llevaron a las partes a calcular que el costo del GEA (las 3 empresas) podría ascender a los US$25.000 millones. Y con esta negociación, en cuentas de las fuentes que conocen de cerca estos movimientos, los Gilisnki pusieron sobre la mesa 2.700 millones de dólares para entrar al GEA y con este acuerdo saldrían con unos 8.000 millones de dólares.
Uno de los aspectos que llevó a los Gilinski a desistir de Sura y Argos y centrarse en Nutresa es que, a su juicio -cuentan allegados- es la compañía que más fácilmente podrían internacionalizar, además, de que no son expertos en el negocio energético que adquirirían con Celsia a través de Argos.
También se conocieron aspectos sobre cuál sería el futuro de Nutresa. Fuentes conocedoras del tema aseguran que no se cambiaría la dirección de la empresa de alimentos. Es decir, se mantendría a Carlos Ignacio Gallego al frente de la organización, así como a su equipo directivo y se mantendría su sede en Medellín.
De igual manera, ya se están activando los enlaces de los socios árabes de los Gilinski para empezar a generar exportaciones a países como India, Arabia Saudita y Bangladesh, y así internacionalizar la marca.
De hecho, antes de concretarse el acuerdo con el GEA, los Gilinski recibieron tres ofertas por su participación en Nutresa, una superior a los US$8.000 millones, pero los empresarios decidieron conservar la empresa.
Sobre el futuro de Nutresa en la Bolsa de Valores de Colombia aún es prematuro saberlo, pero explican las fuentes que dependerá de qué tan exitosa sea la oferta una vez se esté ejecutando el acuerdo con el que los Gilinski aumentarán su participación al 87%.
