Bogotá — La alcaldía de Carlos Fernando Galán está encontrando en el Gobierno de Gustavo Petro su principal obstáculo para lograr ejecutar el plan que tiene diseñado para Bogotá.
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Desde la campaña de octubre de 2023 el presidente ha sido crítico de los planes de Galán para la capital colombiana, desde entonces ha intentado oponerse al Metro, ha criticado las medidas para la crisis hídrica en la ciudad; y ahora, desde el Ministerio de Ambiente, crean trabas para la ejecución de obras de infraestructura definidas como claves.
La puja más reciente entre burgomaestre y Petro está ligada a la ampliación de la Avenida Boyacá, una arteria de movilidad en la capital del país. El foco del enfrentamiento está ligado a la protección de la reserva forestal Thomas Van der Hammen.
Muhammad frenó la Boyacá
El Consejo de Estado admitió una demanda presentada por la ministra de Ambiente, Susana Muhamad, que pide anular la licencia ambiental expedida en diciembre de 2023 para construir la ampliación de la avenida Boyacá entre calles 183 y 235.
El proyecto permitiría conectar Bogotá con los municipios del norte de la Sabana y funcionaría como uno de los principales accesos a Lagos de Torca, uno de los proyectos de vivienda más grandes de los últimos años en la ciudad.
El presidente Petro ha defendido la acción de la ministra Muhammad por la importancia de los bosques que incluye, sin embargo, el alcalde Galán ha recordado al presidente que él, cuando alcalde, también quiso intervenir la reserva.
Galán sostuvo que la demanda es otra intromisión más del Gobierno Nacional en asuntos que deben ser definidos por Bogotá y que la ciudad ya definió.
“Con esta demanda, el Gobierno Petro está haciendo todo para bloquear la posibilidad de que se avance en una obra estratégica para la movilidad de Bogotá. Lo he dicho en varios escenarios: el Gobierno Nacional quiere impedir por cualquier medio la ampliación de la Avenida Boyacá. Este proyecto hace parte del desarrollo organizado con las compensaciones ambientales necesarias que requiere la ciudad”, dijo el alcalde bogotano.
Además, cuestionó al presidente por bloquear un proyecto que él también quiso desarrollar. “La propuesta de Petro era para proteger la estructura ecológica, pero si otro alcalde la construye es para destruirla?”, dijo el alcalde Galán.
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Ambientalistas con el alcalde
Brigitte Baptiste, rectora de la Universidad EAN, y una de las líderes ambientalistas más relevantes de Colombia por sus estudios en biología y conservación ambiental, ha destacado el proyecto de ampliación de la Avenida Boyacá como responsable ambientalmente.
“El alcalde Carlos Fernando Galán tiene toda la razón en defender la proyección de la Avenida Boyacá con todas las inversiones ambientales en la Reserva van der Hammen. Infraestructura con efecto positivo para biodiversidad y la gente. No se justifican más retrasos”, dijo la bióloga.
Tras su defensa del proyecto de infraestructura la académica fue señalada de haber recibido, en el pasado, contratos de Lagos de Torca y que a eso obedecería su visto bueno para la intervención de la reserva.
Ante ello, Baptiste explicó que los contratos no los recibió ella sino la universidad EAN y los expertos que la componen. La ambientalista aseguró que cuando se hacen bien los proyectos se puede respaldar su construcción.
Además, la bióloga expuso que la Avenida está pensada como elemento revitalizador de un territorio muy transformado que requiere inversiones efectivas para que la biodiversidad se recupere con un diseño ecológico cuidadoso.
“La reserva no se ve afectada. Se sustraen 20 hectáreas en su perímetro oriental, se compensan comprando y restaurando otras 60 hectáreas”, aseguró.
Presión presidencial
Ante ello, el presidente Petro aseguró que “en una ciudad que se queda sin agua cómo se puede pensar en destruir la Reserva Forestal Thomas Van Der Hammen”.
De inmediato Enrique Peñalosa, exalcalde de Bogotá y uno de los férreos opositores de Petro aseguró que la Reserva Forestal Van der Hammen es muy especial en el mundo pues es la única que no tiene árboles sino en el 1,3% de su área, que es toda privada, pues sólo tiene invernaderos, cultivos y barrios y son predios privados a los que no se puede ir. Y por supuesto no tiene absolutamente nada que ver con el suministro de agua de Bogotá, ni en Chingaza, ni en la parte alta del Río Bogotá, ni en el Tunjuelo. Son los shows falsamente ambientalistas de Petro”
El exalcalde aseguró que fueron Petro y Claudia López los encargados de bloquear el avance de obras como la ALO y la Avenida Boyacá y de eso desprende que la movilidad en Bogotá sea una de las más difíciles en la región.
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Jorge Robledo, otro contradictor y antes aliado de Petro, culpó al presidente Petro de la crisis hídrica que vive Bogotá porque, recordó, fue durante su alcaldía que la ciudad dejó de lado el tema.
“El que dejó a Bogotá sin agua suficiente fue Petro, porque como alcalde, en 2012, sin estudios, saboteó a Chingaza II que estaba en proceso, proyecto que si se hubiera construido no estaríamos en el problema de hoy”, dijo Robledo.
Además, Robledo aseguró que fue el propio Petro el que saboteó la construcción del Metro subterráneo para Bogotá por no querer continuar con los planes que venían de la administración anterior.