Bogotá — La inflación de abril fue la primera en casi 2 años que no empeoró con respecto a un mes atrás. Desde entonces se viene hablando que ya comienza a ceder y que prueba de ello son los anuncios de reducción de precios de algunos almacenes de cadena.
Incluso, el resultado de abril mejoró con respecto al de marzo y eso se vio reflejado en las expectativas que tienen los analistas económicos en el país, pues ya son más optimistas incluso que el Gobierno Nacional.
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Hace unos días, Ricardo Bonilla, ministro de Hacienda, aseguró que la expectativa del Gobierno era que la inflación corrigiera, como es usual, en la segunda mitad del año al punto que terminara el 2023 en un dígito, e incluso, sostuvo que ese porcentaje de cierre de diciembre podría estar alrededor del 9,5%.
Los analistas del mercado colombiano, en cambio, creen que los precios pueden cerrar el año con un aumento del 9,21%, un mes antes, en marzo, la expectativa indicaba que el IPC concluiría el año alrededor del 9,49%.
¿Alimentos o gasolina?
La inflación de abril mostró una reducción mensual, pero al mismo tiempo el Gobierno anunció que la gasolina corriente subió $600 para mayo.
El dato que el Dane entregue el 5 de junio definirá qué fue más significativo, si el alza en precios de combustibles o si los descuentos que anunciaron algunos retail del país.
“La inflación responde a fenómenos de oferta, demanda y expectativas de las empresas y las personas. Es un problema complejo que no tiene respuestas sencillas. Se requiere de muchos instrumentos para controlarla, varias cosas juntas pueden ayudar a controlarla”, aseguró César Caballero, exdirector del Dane y gerente de Cifras & Conceptos.
Lo cierto es que la inflación de alimentos comenzó a mostrar señales de mejoría, pero a pesar de eso la corrección en el rubro de alimentos inició tarde con respecto al resto de países.
“Los precios de los alimentos en el mundo llevan cayendo 12 meses. Y la inflación anual, que es el cambio en estos precios, ya llegó a -20%. En Colombia los precios apenas llevan cayendo el último mes y la inflación 3 meses, pero aún en 18,4%. De acá a finales del 2024 (si el dólar y El Niño lo permiten), los precios de alimentos en Colombia seguirán cayendo moderadamente hasta que la inflación de alimentos se acerque al 0%”, explicó Felipe Campos, director de Investigaciones Económicas en Alianza Valores.
Pero hay riesgos que siguen latentes en la agenda y que podría hacer que la inflación no descienda como se tiene previsto, e incluso, que revierta las buenas señales que dio recientemente y tome dirección alcista nuevamente.
“Elevar aranceles a las importaciones cuando la inflación bordea el 13% sería muy inoportuno. Varios bienes al consumidor en Colombia son importados o dependen de insumos importados, así que mayores aranceles los encarecerían y generarían alzas adicionales en los precios finales”, aseguró Andrés Pardo Amézquita, estratega jefe para América Latina en XP Investments.
Esto, a raíz de la más reciente alocución presidencial en donde Gustavo Petro aseguró que “el equilibrio económico podría alcanzarse si el país responde con mayores aranceles para proteger los sectores de la industria y la agricultura, y para proteger el trabajo nacional”.
