Bogotá — La semana pasada estalló una de las crisis políticas más grandes que ha enfrentado el gobierno de Gustavo Petro. En medio de denuncias por abuso de poder a través de chuzadas ilegales y dudas sobre cómo se financió la campaña presidencial, el Presidente perdió a dos fichas clave: Laura Sarabia (exjefe de gabinete) y Armando Benedetti (exembajador de Colombia en Venezuela, clave en la campaña electoral).
En medio de este panorama complejo, la Cámara de Representantes anunció que se congelan los debates de las reformas del Gobierno, entre las cuales está la laboral y la de salud que entraron por esa cámara al Congreso.
Sobre la pensional, que entró por Senado, aún no se ha confirmado si se congela también su trámite. Sin embargo, es probable es que sí, al menos en lo que queda de esta legislatura que acaba en junio 15 si no hay sesiones extra.
¿La economía de Colombia sufrirá un ‘coletazo’ por la crisis política del gobierno Petro?
Dado la complejidad del asunto, lo expuesto hasta ahora abre la pregunta de si la crisis política que atraviesa el gobierno Petro podría impactar a la economía de Colombia o no. Para responder a esa cuestión, Bloomberg Línea consultó a expertos.
“Creería que sí. En el muy corto plazo la vía más clara que veo es por las inversiones de portafolio. El capital especulativo es muy sensible a cambios en la estabilidad del panorama político de un país. Es posible que inversionistas con este tipo de capitales decidan sacar sus activos del país, afectando la tasa de cambio, con todas las consecuencias que ello conlleva”, explicó Daniel Ossa, profesor asistente de la Universidad de Denver.
Sin embargo cabe mencionar que por ahora el dólar no ha tenido un efecto al alza debido a la crisis política del gobierno de Colombia. De hecho, este lunes, luego de que el fin de semana se conociera nueva información sobre el escándalo, el dólar cerró la jornada con un precio de cotización de $4.280, una caída de $75,8 frente a la Tasa Representativa del Mercado (TRM) vigente para el día que fue de $4.355,80. De hecho, ese precio es un mínimo histórico de 2023.
Sobre por qué el billete verde tocó un mínimo histórico en Colombia pese al ruido político interno, Ana Vera, economista jefe de IN ON Capital explicó que “el tema del dólar es global y parte de la bajada obedece a la debilidad de la moneda americanada a nivel internacional y fortaleza de activos de algunos países emergentes. Si bien la coyuntura de Colombia localmente es compleja toda la región enfrenta turbulencias políticas desde Chile, Perú, Mexico, Ecuador e incluso Brasil por lo que no creo que la crisis en el gobierno de Petro sea un factor determinante en estos momentos para que se dé corrección en el precio de la moneda”.
Ahora bien, “las crisis políticas tienen generalmente efectos sobre las economías de los países, a través de varios canales y uno de los principales es la confianza de los inversionistas. Cuando aumenta la incertidumbre, puede ser por ejemplo por un evento político en un país, muchos inversionistas pueden tomar la estrategia de retrasar las inversiones que tengan proyectadas en ese país”, resaltó José E. Gómez, profesor asociado de la Universidad de la ciudad de Nueva York.
Además, según Gómez, los empresarios en el país podrían esperarar a que se resuelva la incertidumbre antes de tomar la decisión de inversión, lo cual tendría un efecto sobre la generación de empleo y el crecimiento económico porque se retrasaría la inversión que es un componente de la demanda agregada. Sin embargo, “si este fuera un canal importante, cuando se afecta la confianza inversionista se vería reflejado en el dólar, que se ha venido depreciando en Colombia, entonces no parece que este canal esté operando en este momento en la crisis actual del gobierno colombiano”.
El docente agregó que si la crisis se agudiza, el efecto en el dólar podría revertirse y subir. “Si ya se empieza a dudar de la capacidad o buen ambiente de hacer negocios en Colombia podría tener efectos negativos, pero por ahora no se ha visto”. Es decir, por ahora toca esperar cómo se desarrolla la situación.
Para Ana Vera, “a nivel de activos financieros como algunas reformas planteadas por el plan de Gobierno eran consideradas muy regresivas, el hecho de que se congelen o pongan en pausa en el Congreso puede dar un respiro y se puede dar apetito de corto plazo por los bonos”.
No obstante, “la crisis política puede afectar muy fuertemente la economía porque ante la incertidumbre respecto a la guía de políticas públicas las empresas e inversiones se retrasan y eso tienen más implicaciones es a largo plazo. Cuando no hay inversión a largo plazo se castiga el crecimiento económico, ya que la capacidad instalada se empieza a deteriorar y no se generan nuevos empleos, productos, entre otros”, agregó la experta.
El impacto de la crisis en las reformas de Petro en el Congreso
De acuerdo con José E. Gómez, “la crisis puede tener implicaciones sobre la fuerza del Gobierno para tener la capacidad de dedicarse a negociar y pasar los proyectos que tiene en el Congreso, esas reformas importantes. Y de ser así, tiene implicaciones porque con las reformas se iban a tener unos efectos, entre estos económicos. Entonces, si se retrasan las reformas pues los efectos que se esperaban generar también se retrasan”.
Sobre ese punto, Carlos Arias, analista político, dijo que el hecho de que se hayan congelado las discusiones de la reforma en la Cámara de Representantes, significa que lo más probable es que estas se discutirían en la próxima legislatura, en la que inicia el 20 de julio, pero con mayor dificultad.
Lo anterior “aumenta el riesgo de aprobación de las mismas, no solo porque la coalisión está hecha retazos, sino porque claramente en la próxima legislatura cuando estemos en elecciones de alcaldes y gobernadores seguramente el mapa político se recomponga y las fuerzas progresistas pierdan poder político lo cual dificultaría la negociación de las reformas en el Congreso”, añadió Arias.
De acuerdo con el analista político, congelar las reformas afecta principalmente a la de salud porque era la que más había avanzado en sus debates, pero “seguramente la que en el mediano plazo será la más impactada será la laboral porque los empresarios que van a estar detrás de muchas campañas a alcaldías y gobernaciones y estarán interesados en que sus candidatos hagan algún tipo de promesa alrededor de lo que tiene que ver con esta reforma o con temas económicos y de empleo”.
“Y una vez estos candidatos obtengan el favor popular, seguramente los empresarios tendrán mucho que ver allí en el juego político y esto se verá reflejado en los representantes a la Cámara, obviamente también porque el panorama político puede llegar a cambiar, seguramente los intereses de los congresistas van a modificarse”, continuó diciendo Arias.