Bogotá — Los altos precios de la carne en el país se están reflejando en una caída del consumo y en el peor de los escenarios generaría una crisis de seguridad alimentaria en medio del aumento del costo de vida que llegó al 13,34% anual en marzo en Colombia, advirtió este jueves la Asociación de Frigoríficos de Colombia (Asofricol).
La Asociación considera que el alza de precios ha sido presionada por la exportación de animales vivos que “está afectando a toda la cadena productiva”, incluso al sector ganadero.
“Nos causa preocupación porque también está siendo presionado por el aumento del precio del ganado de reposición, aumentando de esta manera la estructura de costos de todo el sector”, indica.
Asofricol lamentó que en la última década los colombianos han ido reduciendo el consumo de carne y están dejando de consumir 3kg por habitante al año.
Esto se refleja en más de US$750 millones que dejan de ingresar a la economía del país y la pérdida del empleo de 9.760 familias que viven de esta actividad, según Asofricol.
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En este sentido, alerta que el “alza del precio de la carne está ad portas de generar una crisis de seguridad alimentaria”.
Según el Departamento Administrativo Nacional de Estadística (Dane), la carne de res y sus derivados presentó un incremento de precios del 15,89% anual hasta marzo.
Entre tanto, la carne de cerdo y sus derivados aumentó un 21,89% y la carne de aves 12,45% en el mismo período.
Por su parte, las carnes preparadas, de charcutería y otros productos cárnicos subió un 19,54%.
“El alto precio de la carne en el mercado nacional es un reflejo de varios factores, en especial del auge de la exportación del ganado en pie que, además de sustituir la exportación de carne con valor agregado a mercados como Asia y África, tiene un efecto especulativo en el precio de los animales, lo que afecta el ciclo ganadero e impacta el suministro y el precio de la carne para los colombianos”, opinó Álvaro Urrea, presidente de Asofricol.
Agregó que por estas razones se está “ante una emergencia en el sector cárnico que requiere la intervención del Estado”.
Asofricol advierte que en los últimos meses se ha anunciado la suspensión del servicio de los frigoríficos de Caucasia (Antioquia); Garzón (Huila) y Barrancabermeja (Santander).
Estos frigoríficos han sufrido el incremento en la estructura de costos y la continua disminución del consumo de carne.
Según la Asociación, estas infraestructuras generan más de 700 empleos directos y 2.800 indirectos.
“La carne de res no puede convertirse en un producto de lujo para los colombianos”, puntualizó Urrea.
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