Bogotá — La posibilidad de que Colombia entre a racionar energía sigue aumentando y en cuestión de un mes podría sumarse a las restricciones de agua que desde este jueves comenzarán a aplicarse en Bogotá.
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Desde hace más de un año los expertos del sector energético vienen advirtiendo que en los meses de mayor estrés por el Fenómeno de El Niño se podía presentar el riesgo de apagones si no se tomaban las medidas adecuadas.
Alejandro Lucio, director ejecutivo de Óptima Consultores y expresidente de Derivex, dijo que “estamos ad-portas de una crisis advertida”.
Y es que según el experto del sector energético los agentes del mercado fueron confiados e irresponsables ante las amenazas del presidente Petro de intervenir los precios de la energía en bolsa.
Dice Lucio que “en aras de mantener el precio de bolsa “contenido”, alrededor de los COP$500 / kWh, que el gobierno en su amenaza intervencionista desnudó como nivel de precio tolerable, llevaron sin necesidad el embalse agregado a los niveles que hoy tenemos”. En síntesis, Lucio considera que generaron de más con recurso hídrico desembalsando más rápido de lo que era responsable.
La crítica de Lucio a los agentes del mercado, y al Gobierno que propició el comportamiento de los participantes de la bolsa de energía es que “si se hubiera generado con recurso térmico a full capacidad, por supuesto el precio de energía en bolsa habría bordeado fácilmente los COP$1.000/kWh pero se hubiera conservado el embalse”.
Apagón de 1992
Durante el Gobierno de César Gaviria Colombia se enfrentó a un racionamiento eléctrico que se mantuvo desde marzo de 1992 hasta febrero de 1993 por cuenta del bajo nivel de los embalses.
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Desde entonces se reformuló el sistema de energía colombiano bajo la premisa de que “No hay energía más cara que la que no se tiene”.
Lucio aseguró que cualquiera que haya sufrido los dos o tres últimos fenómenos, todos ellos con sus propias crisis y angustias (2009-2010, 2015-2016 y 2020), sabe bien que, en Colombia, la normalización de lluvias en el mejor de los casos llega en mayo. Criticó a quienes desestimaron el riesgo de apagones con el argumento de que en marzo terminaría el periodo de sequía.
El experto insiste en que “si las lluvias no se recuperan al menos a lo que llueve normalmente un abril no se puede descartar un racionamiento”. Y como ya lo explicó el alcalde de Bogotá Carlos Fernando Galán a un usuario de X indignado, “las lluvias en Chapinero no sirven porque no llenan embalses”.
Voces más optimistas
El presidente del Grupo Energía Bogotá, Juan Ricardo Ortega, le dijo a Bloomberg Línea que a pesar del nivel actual de los embalses y del nivel de evolución del Fenómeno de El Niño las termoeléctricas tienen cómo generar, si no se dañan. “La clave es que esto no dure mucho más de un mes”, especificó.
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Agregó que “el máximo de potencia que el sistema requiere es de 11 gigas y no hidroeléctrica el país tiene más de seis gigas. Necesitas menos del 50% de lo que tienes en energía hidráulica, y eso hay, pero insisto, lo importante es que no se dañen las térmicas, porque prendidas 24/7 se pueden dañar, y ese es un riesgo, por eso no se debe prolongar mucho más de un mes”, explicó.
