Bloomberg — La presidenta del Banco Central de Chile insistió el jueves en el mensaje restrictivo de la institución, aunque reconoció que los costos de endeudamiento más altos en más de dos décadas frenarán la persistente inflación subyacente.
Los encargados de la política monetaria no recortarán las tasas hasta que la inflación subyacente siga una clara tendencia a la baja, mientras el consumo se desacelera y la brecha de actividad se acerca a niveles negativos, dijo Rosanna Costa a Bloomberg TV.
“Nos preocupa también tomar decisiones apresuradas y que la inflación rebote y las expectativas reboten”, señaló Costa desde Washington DC, donde asiste a las reuniones de Primavera del Fondo Monetario Internacional. “Ese costo también es tremendamente alto”.
Las tasas swap se dispararon este mes porque el mercado “entiende muy bien” el mensaje del banco central sobre los costos de endeudamiento, dijo la titular de la autoridad monetaria. Muchos esperan ahora que el banco central no recorte las tasas hasta el tercer trimestre, mucho después del recorte previsto para abril a principios de año.
Los funcionarios del banco central han mantenido la tasa de política monetaria sin cambios en las tres últimas reuniones, ya que los precios han disminuido de forma más gradual de lo previsto. Una medida clave de la inflación subyacente incluso se aceleró el mes pasado. En conjunto, la autoridad monetaria considera que el aumento del costo de la vida se mantendrá por encima de la meta del 3% hasta fines de 2024.
Chile fue una de las primeras economías de la región en ajustar su política monetaria a medida que remitía la pandemia, en un ciclo de aumentos de tasas que sumó 10,75 puntos porcentuales a los costos de endeudamiento. En los últimos dos años, el país se ha visto afectado por shocks inflacionarios, entre ellos miles de millones de dólares en retiros anticipados de pensiones y un fuerte incremento de los precios de las materias primas tras la invasión rusa a Ucrania.
“Nosotros somos una economía que se está ajustando desde niveles muy altos que no son sostenibles”, afirmó Costa. “Lo que estamos haciendo es llevarla a niveles sostenibles”.
Contraatacando
Costa, de 65 años, es la primera mujer que dirige el banco central del país. Ha sido miembro del consejo del banco central desde 2017 y anteriormente fue directora de presupuesto del Ministerio de Hacienda.
La decisión del banco central de mantener los costos de endeudamiento la semana pasada y una caída de la inflación en marzo empujaron las tasas de interés reales a territorio positivo por primera vez desde 2019.
Los responsables de la política monetaria también elevaron la semana pasada las estimaciones de inflación para fin de año del 3,6% al 4,6%, así como las proyecciones para el producto interno bruto, lo que redujo aún más las apuestas de que los recortes de los costos de endeudamiento podrían ser inminentes.
La actividad interna muestra señales mixtas a medida que se endurece la política monetaria. Los analistas apuestan a que Chile será una de las únicas economías importantes de la región en contraerse este año, tras salir de una recesión recién a fines de 2022.
La actividad económica de Chile cayó más de lo esperado en febrero debido a un descenso de la producción minera, según informó el banco central el 3 de abril. Sin embargo, el aumento del mes anterior se revisó del 0,5% al 1,6%.
En enero, el presidente Gabriel Boric presentó un paquete de ayudas sociales de US$2.000 millones, que incluye un aumento de los bonos a las familias de escasos recursos. Su Gobierno está impulsando una agenda económica que incluye una reforma de pensiones, y está tratando de reactivar los esfuerzos para una reforma tributaria después de que su propuesta inicial fuera rechazada por el Congreso.
Mientras que los Gobiernos de otros países de la región, como Colombia y Brasil, han criticado a sus bancos centrales en los últimos meses, en Chile “se ha apoyado bastante el rol del banco central y su autonomía”, dijo Costa.
“Pero cuando uno tiene niveles de inflación tan altos, la gente está sufriendo”, señaló. “Nosotros tenemos que hacer el trabajo y tenemos que llevar y converger la inflación” a la meta.