Bloomberg — Los partidos de centroderecha chilenos ganaron algunas elecciones locales clave el fin de semana, pero no lograron consolidar su dominio a un año de las presidenciales.
El bloque arrebató a la coalición gobernante el control de Santiago Centro y Nunoa, pero no pudo retener la alcaldía del municipio más grande de Chile, Puente Alto.
Dentro de la oposición, la alianza Chile Vamos ganó más de 120 municipios, frente a los 87 de las anteriores elecciones locales. El ultraconservador Partido Republicano ganó ocho distritos, perdiendo frente a Chile Vamos en la rica zona de Las Condes.
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“La derecha está recuperando terreno electoral”, publicó en X Claudio Fuentes, politólogo de la Universidad Diego Portales, pero “no se puede hablar de una fuerza política dominante en Chile. La carrera presidencial sigue abierta”.
El gobierno del presidente Gabriel Boric se anotó una victoria significativa: Tomás Vodanovic obtuvo un aplastante triunfo en Maipú, uno de los municipios más grandes del país. Algunos ven a Vodanovic como posible candidato presidencial el año que viene.
Otro posible aspirante a la presidencia por la centroizquierda, Claudio Orrego, no consiguió una victoria en primera vuelta para gobernador de Santiago y tendrá que disputar una segunda vuelta el mes que viene con el candidato de centroderecha Francisco Orrego. Ni Vodanovic ni Orrego han manifestado su interés por presentarse a las elecciones presidenciales.
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La coalición gobernante también mantuvo el control del emblemático municipio de Viña del Mar.
“Nadie puede atribuirse un triunfo aplastante” en estas elecciones, declaró Boric a la prensa tras la votación.
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