En la tercera semana de junio, un sistema frontal generó las mayores lluvias registradas en la zona centro y sur de Chile en los últimos 30 años, dejando un saldo de dos personas muertas y miles de damnificados. Tras aquel triste episodio, Chile se prepara un invierno más lluvioso que los anteriores, que podría potenciarse con la llegada del fenómeno climatológico global conocido como El Niño.
Según publicó la semana pasada el Servicio Oficial de Meteorología de Chile, para el trimestre julio-agosto-septiembre de 2023 “se proyectan lluvias acumuladas sobre el rango normal entre la región de Coquimbo hasta Magallanes”.
A modo de ejemplo, el organismo reseña que en Talca debiesen registrarse más de 254 milímetros de lluvia, en Concepción más de 435 mm y en Puerto Montt más de 510 mm de lluvia en los próximos tres meses. Una situación similar, pero más leve, es la que dará en el centro de la capital.
Meteorología anticipó, además, que las lluvias entre las regiones de Coquimbo y la Metropolitana se pronostican con un mayor grado de incertidumbre. Pero a pesar de esto, “el pronóstico indica una tendencia hacia una condición normal a sobre lo normal” de lluvia en esta zona.
Es decir, que es probable que “en Santiago se supere el umbral superior de normalidad de 155 milímetros en el trimestre completo”.
Por otro lado, el portal especializado clima, Meteored, proyecta que en los sistemas frontales lleguen con importantes precipitaciones desde la Región de Valparaíso hasta la Región del Biobío, con O’Higgins y el Maule como las zonas más beneficiadas. Asimismo, se espera un déficit de lluvias por debajo de lo normal entre la Región de Los Lagos y la Región de Magallanes.
Por su parte, el especialista en meteorología e investigador de la Universidad de O’Higgins (UOH), Raúl Valenzuela, indicó que “será un invierno más lluvioso que los anteriores”, según recogió el sito Red Agrícola.
“De acuerdo con La Administración Nacional Oceánica y Atmosférica de EE.UU. ( NOAA) estamos dentro de la anomalía de temperatura en el Pacífico para declarar el evento de El Niño, lo que significa que tendremos una atmósfera más cálida y húmeda, que también cambia la circulación del aire. Cuando ocurre el fenómeno del El Niño nos podemos encontrar con zonas más lluviosas que otras como la zona central y con sequía en varios países”, detalló Valenzuela.
Y amplió: “La principal característica de este fenómeno es el aumento de temperatura superficial del mar frente a la costa de Perú y Ecuador. Tendremos un evento similar a lo que pasó en 1997, cuando se registraron intensas lluvias en el país. A pesar de que el evento de 2015 estuvo dentro de los eventos importantes desde 1950, conocido como El Niño Godzilla, no implicó un año anormalmente lluvioso”.
El fenómeno de El Niño se asocia típicamente con un incremento de la pluviosidad en algunas zonas meridionales de:
- América del Sur
- El sur de los Estados Unidos
- El Cuerno de África
- Asia Central
Por el contrario, El Niño también puede provocar graves sequías en:
- Australia
- Indonesia
- Algunas partes del sur de Asia, América Central, norte de América del Sur
