Bloomberg — La actividad económica de Chile se expandió más de lo esperado en noviembre debido a los avances registrados por el sector minero y el de servicios, lo que respalda la previsión del presidente Gabriel Boric de que habrá un repunte del crecimiento en 2024 tras un año de estancamiento.
El índice Imacec, un referente del producto interno bruto, subió un 0,3% desde octubre, por encima de la estimación media del 0,2% de los analistas que participaron en una encuesta de Bloomberg. El índice aumentó un 1,2% con respecto al año anterior, informó el banco central el martes.
Chile busca dejar atrás un año marcado por condiciones monetarias restrictivas, una débil demanda de los consumidores y una inflación superior a la meta; y tanto el Gobierno como el banco central estiman que el crecimiento se estancará en 2023. No obstante, las cosas están empezando a mejorar: el ministro de Hacienda, Mario Marcel, dijo que la economía se expandirá un 2,5% en 2024, un ritmo que superaría el promedio regional, según analistas encuestados por Bloomberg.
La minería aumentó un 1,3% en noviembre respecto del mes anterior, mientras que los servicios avanzaron un 0,3% durante el período, según el banco central. Por otro lado, el comercio cayó un 0,6%, arrastrado por retrocesos tanto en el comercio mayorista como en el minorista.
El discurso de Boric
En un discurso con motivo del Año Nuevo realizado a última hora del domingo, Boric dijo que la economía crecerá fuertemente en 2024, impulsada por el aumento del empleo y la inversión.
“Tengo claro que la gente espera soluciones de la política, no mezquindades ni peleas”, dijo, y pidió a los legisladores que avancen en las propuestas de reforma tributaria y de pensiones de su Gobierno.
Las perspectivas de crecimiento están recibiendo un impulso gracias a los agresivos recortes de tasas de interés del banco central, que han reducido en tres puntos porcentuales los costos de endeudamiento desde julio. La inflación anual se está desacelerando y alcanzará la meta del 3% este año.
Por otro lado, los niveles de confianza empresarial siguen siendo históricamente bajos luego de que un intento fallido de cuatro años para reescribir la Constitución de la nación inquietara a los inversionistas. Si bien el desempleo cayó en noviembre, la economía todavía está muy por debajo del número de puestos de trabajo que existían antes de la pandemia.