La Sala de la Cámara aprobó el proyecto que establece un reajuste total de 4,9% para los trabajadores del sector público. Ahora deberá ser el Senado el que dé el visto bueno definitivo para que vea la luz y se convierta en Ley.
La normativa fue aprobada en general por 101 votos a favor, 8 en contra y 3 abstenciones.
¿De qué se trata?
El proyecto que acaba de sortear un escollo legislativo incluye un reajuste general gradual de 4,9%: 3% en diciembre de 2024, 1,2% en enero 2025 y 0,64% en junio del mismo año; un reajuste de bonos de 4,2% y un reajuste de 2% más para remuneraciones mínimas y bonos para rentas bajas -por encima del reajuste general-, quedando en 6,2% en enero y en 6,9% en junio de 2025. Asimismo, se dispondrá la vigencia permanente de los bonos de Navidad, fiestas patrias, escolaridad y vacaciones, asegurando su entrega anual oportuna evitando retrasos en los plazos de pago.
También se extenderá de forma indefinida la vigencia de las leyes de incentivo al retiro correspondientes a las organizaciones gremiales firmantes, estableciendo los cupos y reglas de aplicación durante la transición y reglas de adjudicación para cupos no utilizados.
Por otro lado, se indica que a partir de 2027 los funcionarios y funcionarias de estas instituciones cesarán sus funciones al cumplir 75 años de edad y recibirán una indemnización equivalente al total de las remuneraciones con tope de 90 UF anuales, por cada año de servicio en la institución, con un máximo de seis.
Según números del Gobierno, el reajuste beneficiará a 930.918 personas y tendrá un costo fiscal de $1.892 mil millones en régimen, considerando la totalidad de los beneficios.
Aguinaldo y bonos
El proyecto contempla, además, el pago de un aguinaldo de Navidad, que será de $68.865 para aquellos trabajadores cuya remuneración líquida percibida en el mes de noviembre del 2024 sea igual o inferior a $1.025.622. Para quienes perciban una remuneración líquida que supere tal cantidad en esa misma fecha el monto será de $36.427.
La iniciativa incluye el aguinaldo de fiestas patrias, los tradicionales aguinaldos de Navidad y de septiembre del sector pasivo, así como los bonos de escolaridad y vacaciones, los cuales se reajustarán vía IPC. Todos estos beneficios se incorporan desde este año con carácter de permanente. Previamente, se incluían año a año en cada proyecto de reajuste.
El proyecto, que también contempla un bono de invierno para los jubilados, incluye una serie de aspectos misceláneos que deben entrar en vigencia el 31 de diciembre próximo. Entre otros, destacan el aporte para los servicios de bienestar, aporte a las universidades, beneficios de incentivos al retiro de los funcionarios públicos, perfeccionamientos de normas al teletrabajo, modificación de la planta de Gendarmería, entrega de un bono para personal de carabineros, bono de desempeño laboral para asistentes de la educación y una asignación de estímulo en materia de salud.