Bloomberg — Petrobras (PETR4) está presionando para extraer la mayor cantidad posible de petróleo de sus yacimientos existentes en Brasil, al tiempo que busca nuevas reservas para evitar que la producción comience a declinar en la década de 2030.
El mantra “todo el petróleo cuenta” guiará el próximo plan estratégico de la compañía que se dará a conocer a finales de noviembre, según dijeron el lunes a la prensa miembros del equipo directivo.
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El gigante petrolero brasileño busca revitalizar los yacimientos más antiguos, como los de la cuenca de Campos, donde una baja tasa de recuperación del 17% “molesta” a la dirección, dijo la CEO, Magda Chambriard. La empresa debería terminar a principios del año que viene los estudios para reacondicionar cuatro plataformas petrolíferas en la cuenca de Campos que, de otro modo, serían desechadas, dijo.
Lo que está en juego es la velocidad a la que crece la producción global de Brasil en un momento en el que los precios del petróleo se enfrentan a múltiples vientos en contra. La OPEP+ está a punto de comenzar a restablecer la producción en un momento en que la demanda en China se tambalea. Petrobras tiene el reto de poner en producción nuevos proyectos mientras intenta contener la rapidez con la que sus yacimientos más antiguos entran en declive, lo que nubla las perspectivas sobre cuánto crecimiento provendrá de Brasil.
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La Agencia Internacional de la Energía, o AIE, prevé que la producción de Brasil crezca 190.000 barriles diarios el año que viene. Mientras tanto, Jefferies Financial Group Inc prevé que la producción de Petrobras, que explota cerca del 90% de la producción brasileña, se mantenga estable en 2025.
Petroleo Brasileiro SA, como se conoce formalmente a la empresa, ha conseguido acelerar algunos de sus proyectos de producción. Pondrá en marcha hasta tres buques de producción flotantes antes de finales de año, añadiendo 505.000 barriles diarios de capacidad de producción que aumentará gradualmente. Algunos de ellos, como el buque de producción María Quiteria, se esperaba originalmente que comenzaran a operar en 2025.
Plataformas en alta mar
Petrobras también está trabajando con los proveedores para que resulte más económico construir las unidades de producción que la empresa necesita para seguir ampliando la producción, sobre todo en los yacimientos más pequeños con volúmenes más bajos.
“Estamos enviando un mensaje al mercado. Brasil necesita plataformas más asequibles” para los proyectos en alta mar, dijo Chambriard.
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El gigante petrolero es optimista respecto a que las autoridades medioambientales brasileñas aprueben una licencia para perforar un pozo en la cuenca de Foz do Amazonas, en el llamado Margen Ecuatorial, porque ha cumplido todos los requisitos, dijo la jefa de exploración y producción, Sylvia dos Anos.
Las inversiones globales de Petrobras no cambiarán significativamente respecto al anterior plan quinquenal de US$102.000 millones, dijo Chambriard. La dirección aún está decidiendo la cantidad final para 2025-2029, dijo.
Pago de dividendos
La empresa con sede en Río de Janeiro mantendrá sin cambios su política de dividendos, consistente en pagar el 45% del flujo de caja libre, pero es posible que ajuste su punto de referencia en función de las tenencias óptimas de efectivo, dijo el director financiero Fernando Melgarejo. La cifra es relevante porque contribuye a cuánto paga la compañía a los accionistas en dividendos extraordinarios. Petrobras planea distribuir cualquier excedente de efectivo siempre que no socave la sostenibilidad financiera de la empresa, dijo.
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Los analistas de Jefferies ven un aumento del 10% en el capex 2025-2029 de Petrobras y un margen limitado para dividendos extraordinarios en 2025, a menos que se produzca una nueva mejora de los precios del petróleo. La consultora espera que Petrobras se enfrente a limitaciones de equipamiento, y un impulso para aumentar el suministro de gas natural al mercado nacional debería moderar el crecimiento de la producción durante los próximos dos o tres años, según señala en una nota a clientes.
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