Bloomberg — Los analistas de Brasil elevaron sus expectativas de inflación para 2024 por cuarta semana consecutiva y ahora esperan que los precios al consumo suban por encima del rango de tolerancia, a medida que los inversores rebajan la preocupación por el gasto público.
Se prevé que los precios al consumo aumenten un 4,55% en diciembre, por encima de la estimación del 4,5% de la semana pasada, según una encuesta semanal de economistas del banco central publicada el lunes. Se espera que la inflación anual alcance el 4% a finales del próximo año y el 4,04% en un horizonte de doce meses similar al del banco.
Los banqueros centrales dirigidos por Roberto Campos Neto están advirtiendo de las repercusiones que el aumento del gasto público está teniendo en los esfuerzos por frenar la inflación hasta el objetivo del 3%.
A medida que el gobierno eleva el salario mínimo y amplía las transferencias de dinero, los hogares tienden a consumir más, lo que posiblemente haga subir el coste de la vida, dijeron los responsables políticos durante los discursos pronunciados en Washington DC la semana pasada. Esas preocupaciones también estuvieron detrás de su decisión de elevar las tasas al 10,75% el mes pasado.
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La inflación anual se aceleró hasta el 4,47% a principios de octubre, justo por debajo del techo del rango de tolerancia del 4,5% del banco central. Las facturas residenciales de electricidad se dispararon, mientras que los alimentos y las bebidas también subieron debido a la grave sequía.
El ministro de Finanzas, Fernando Haddad, ha mantenido un tono más optimista, afirmando que la inflación se mantendrá dentro del rango de tolerancia del banco este año. Su equipo anunciará pronto medidas para apuntalar las cuentas públicas sin necesidad de reformular las reglas fiscales del país, dijo Haddad en una conferencia de prensa mientras asistía a las reuniones anuales del Fondo Monetario Internacional la semana pasada.
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La preocupación de los inversores por la trayectoria de la deuda pública brasileña está pesando sobre activos como el real, que es una de las divisas de mercados emergentes con peor comportamiento este año. Campos Neto ha reiterado que es necesario un "shock fiscal positivo" que ayude a reducir los costes de endeudamiento.
Los analistas de la encuesta mantuvieron estables sus estimaciones de tasas de interés a finales de año en el 11,75% para 2024 y en el 11,25% para 2025.
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