Bloomberg — Brasil sigue adelante con sus planes de importar gas natural de la formación argentina de Vaca Muerta, en una señal de que los acuerdos comerciales bilaterales pueden superar una relación política complicada.
El Ministerio de Energía de Brasil firmó este lunes un memorando de entendimiento con Argentina para identificar la infraestructura necesaria para aumentar el suministro de gas natural, informó el ministerio brasileño. Brasil espera que los volúmenes importados de Argentina alcancen los 30 millones de metros cúbicos diarios en 2030, y forman parte de un plan más amplio para utilizar el combustible para acelerar el crecimiento industrial, según el ministerio.
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El acuerdo muestra cómo los negocios entre Brasil y Argentina son capaces de avanzar incluso cuando el presidente argentino, Javier Milei, desafía los esfuerzos de su homólogo brasileño, Luiz Inácio Lula da Silva, por ser un actor importante en la escena mundial.
Los dos líderes han estado enzarzados en una batalla pública desde el año pasado, cuando Lula desplegó un equipo de asesores de campaña para trabajar para el adversario electoral de Milei y el argentino metió a su vecino en un grupo de “comunistas” con los que no trabajaría.
El memorando de entendimiento crea un grupo de trabajo bilateral para identificar las medidas necesarias para hacer económicamente viable el suministro de gas natural argentino a Brasil. Argentina también necesita asegurarse un mercado para sus vastas reservas de gas para acelerar el crecimiento de la producción.
El acuerdo sobre el gas debería permitir a Brasil comprar 2 millones de metros cúbicos diarios de gas a principios del año próximo a las provincias argentinas de Neuquén y Río Negro, y alcanzar los 10 millones de metros cúbicos en los próximos tres años. Brasil calcula que el gas de Vaca Muerta podría costar aproximadamente la mitad del precio medio actual de US$14 por BTU.
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En un principio, se utilizaría un gasoducto que atraviesa Bolivia para enviar el gas, pero aún deben resolverse los costos de transporte, que son una cuestión clave, según el ministerio. Bolivia solía suministrar este combustible para centrales eléctricas tanto a Brasil como a Argentina hasta que su producción se redujo.
Otras opciones de infraestructura de transporte para ampliar el flujo de gas argentino a Brasil podrían incluir nuevos gasoductos que podrían pasar por Argentina o incluso por Paraguay, y envíos de gas natural licuado desde terminales argentinas a terminales en la costa de Brasil, dijo el funcionario. El Ministerio de Energía de Argentina no respondió de inmediato a una solicitud de comentarios.
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