Bloomberg Línea — El Gobierno de Argentina le retiró al expresidente boliviano Evo Morales el estatus de refugiado que le fue otorgado durante la Administración de Alberto Fernández, informó este miércoles el Ministerio de Justicia.
El ministro Mariano Cúneo Libarona publicó un comunicado oficial en sus redes sociales y, además, escribió: “Revocamos el estatus de refugiado otorgado al intento de dictador socialista Evo Morales. Este Gobierno de ninguna manera utilizará los recursos de los argentinos para proteger a criminales, terroristas o autoritarios”.
En el documento compartido con la opinión pública se aseguró que el refugio concedido a Evo en 2019 fue utilizado como una “herramienta política” por el entonces presidente de Argentina, Alberto Fernández. Además, precisó que si el exmandatario boliviano abandonó su país cinco años atrás fue por “graves acusaciones”, entre ellas, “corrupción, fraude electoral y persecución a opositores”.
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El Ministerio de Justicia añadió en el documento que Evo Morales no enfrenta peligros que ameriten el estatus de refugiado en su país, tanto, que incluso regresó a Bolivia cuando el presidente Luis Arce llegó a la presidencia.
“No ayudamos a quienes siembran el terror y atentan contra la democracia”, concluyó.
Entretanto, el portavoz presidencial argentino, Manuel Adorni, confirmó la noticia a través de una publicación en X en la que se lee: “Se ha dado por finalizada la condición de refugiado de Juan Evo Morales Ayma”.
Por qué Evo Morales se refugió en Argentina
Evo Morales arribó a Argentina en 2019, luego de un breve paso por Cuba y, antes, por México, huyendo de Bolivia. La razón: dejó su cargo como presidente tras las presuntas irregularidades en su tercera reelección, denunciadas por la Organización de los Estados Americanos (OEA).
“Les he dado asilo político para que entren y ellos luego pidieron ser refugiados”, aseguró el entonces canciller de Argentina, Felipe Solá.
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A quienes hizo referencia, además de Evo Morales, fueron el ese entonces vicepresidente de Bolivia, Álvaro García Linera, y la ministra de Salud, Lilly Gabriela Montaño, así como a otros cuatro miembros de su Gobierno.
Evo, sin embargo, regresó a Argentina tras la elección presidencial de Luis Arce, quien fungió como su ministro de Economía y Finanzas Públicas de 2006 a 2019.
Ahora bien, la relación entre Arce y Morales permanece rota desde que este último anunció su aspiración a participar en los comicios presidenciales de 2025, pese a que el Tribunal Constitucional Plurinacional aseguró que no es posible.
La lucha entre ambos también radican en que están buscando que el Movimiento al Socialismo (Bolivia) los avale como candidatos presidenciales para el próximo año, aunque el partido político debe elegir solo a uno.
De hecho, en la segunda mitad de septiembre Evo Morales adelantó una marcha contra el presidente Luis Arce y su postura frente a la crisis económica de Bolivia, manifestaciones que fueron señaladas como golpistas por el Gobierno.
