Buenos Aires — YPF, la principal empresa energética de Argentina, está considerando la venta de su unidad de litio como parte de una estrategia de desinversión para fortalecer las inversiones en los yacimientos no convencionales de Vaca Muerta.
Los ejecutivos están considerando una salida de YPF Litio, según una persona familiarizada con el asunto que pidió no ser nombrada porque la información es privada.
La compañía ha estado revisando las participaciones de negocios que caen fuera de la esfera tradicional de YPF de la perforación de petróleo y gas.
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La venta de la unidad se produciría sólo tres años después de su creación, en un momento en que YPF -y las petroleras de todo el mundo- buscan reposicionarse hacia la transición energética.
YPF Litio ha estado explorando áreas en la provincia de Catamarca Argentina, en el llamado triángulo del litio de Sudamérica, que también integran Chile y Bolivia. Otras empresas argentinas grandes como Pan American Energy Group y una unidad del multimillonario Paolo Grupo Techint, del multimillonario Paolo Rocca, también han diversificado sus negocios apuntando a los recursos de litio del país.
YPF Litio también contribuyó a los esfuerzos del anterior gobierno por fomentar la industria de baterías de iones de litio en Argentina. Junto con Catamarca, negoció un acuerdo no vinculante con la empresa china Zijin Mining Group Co. para fabricar cátodos de baterías.
Bajo la nueva dirección nombrada por el gobierno del Javier Milei, un libertario poco interesado en el desarrollo en el desarrollo nacional de baterías, YPF se concentra en aumentar la producción en Vaca Muerta, no sólo perforando más pozos, sino liderando importantes de infraestructuras.
YPF ya se ha desprendido de 22 yacimientos antiguos convencionales y y está en conversaciones con interesados en unos 30 más, mientras planea vender los negocios de lubricantes en Chile y Brasil y una participación en una distribuidora de gas natural de Buenos Aires.
El CEO y presidente, Horacio Marín, ha prometido mantener empresas rentables, como un fabricante de fertilizantes que consume el gas natural de YPF, Profertil, así como seguir explorando dos nuevas fronteras petroleras: otra zona de no convencional y bloques en aguas profundas frente a la costa atlántica.
Para ello, YPF Agro, un negocio agrícola que genera dinero, podría convertirse en una unidad autónoma de autofinanciación como sucede con YPF Luz, dijo la persona. YPF Agro opera en la gigante industria sojera argentina, vendiendo gasoil y fertilizantes a los agricultores tomando soja como pago en operaciones por valor de unos US$1.000 millones de dólares al año.
Mientras tanto, no está claro qué ocurrirá con un programa de baterías Y-TEC, un centro de investigación y desarrollo afiliado a YPF Litio. Marín dijo que quiere que los investigadores se centren en tecnología que ayude al empuje en Vaca Muerta, donde ya es más barato producir crudo que en la cuenca del Permian (Estados Unidos), según Rystad Energy.
