Buenos Aires — YPF avanza con las obras para la construcción de un oleoducto Vaca Muerta Sur que conecte a los yacimientos no convencionales con el océano Atlántico para así aumentar la capacidad de transporte de petróleo y poder exportar más crudo.
La inversión total rondará los US$2.500 millones e incluye, además del caño (600 kilómetros aproximado), estaciones de almacenamiento y bombeo más dos boyas de carga en Punta Colorada, Río Negro.
Para llevar a cabo esta tarea, el exTecpetrol y CEO y presidente de YPF, Horacio Marín, contrató a Gustavo Gallino, quien se desempeñó durante más de veinte años en la ingeniería y construcción en Techint y estuvo al frente de parte de la construcción del gasoducto Néstor Kirchner.
En el rol de vicepresidente de Infraestructura de YPF, Gallino dijo que aspiran a que el oleoducto esté operativo para el 1 de julio de 2026. En el marco de un evento organizado por EconoJournal, el empresario precisó que ya han enviado el pliego de la licitación para la construcción del segundo tramo del oleoducto.
Primeros pasos de la obra
YPF ya comenzó con la construcción del primer tramo del oleoducto Vaca Muerta Sur (128 km) que une las localidades de Añelo, Neuquén y Allen con el sistema de Oldelval. El caño se conecta desde Loma Campana, la concesión más importante de Vaca Muerta (aporta el 21% de la producción no convencional).
Este primer tramo tiene una inversión aproximada de US$190 millones y su construcción demandará más de 10 mil caños de 20 y 30 pulgadas, precisó la consultora Aleph Energy.
Hasta que esté listo el segundo tramo desde Allén a Chelforó (100 kilómetros) y de ahí a Punta Colorada (350 kilómetros), la primera etapa permitirá fortalecer “todo el sistema de evacuación de petróleo de la cuenca, aprovechando al máximo la capacidad de transporte hacía las refinerías y hacia el puerto de Bahía Blanca”, agregó la consultora.
Potencial del oleoducto
La obra comenzará con una capacidad de transporte de 180 mil barriles diarios en 2026 hasta los 370 mil barriles diarios en el pico (2027/2028). Según informaron desde YPF, el objetivo es poder tener una capacidad de evacuación desde Vaca Muerta de 1 millón de barriles diarios, que se lograría con OTASA, el ducto de exportación de Chile; la ampliación de Oldelval, que conecta con Bahía Blanca, sumado a Vaca Muerta Sur.
La terminal de Puerto Colorado apunta a exportar, en su pico, 135 millones de barriles por año: a precios de hoy (US$80 el barril), que es alto, implicaría US$10.800.000.000 en exportaciones.
Esos miles de millones de dólares son parte de los US$30.000 millones que Marín proyecta que generará el sector de gas y petróleo en Argentina. Otra porción importante lo aportaría el Gas Natural Licuado (GNL).
Búsqueda de socios
YPF está buscando socios para la construcción del proyecto y también para cuando el caño esté en operación. Para lo primero, Gallino dijo que “hay dos empresas internacionales para optimizar el diseño y ver de qué manera lo podemos mejorar desde el costo que tenga para que la rentabilidad del proyecto sea mejor”.
“Este proyecto, como el de GNL, son para la industria. Los llevamos adelante porque YPF tiene el 50% de la producción. Es importante que los lidere. Pero invitamos al resto de los productores a sumarse, como socios o cargadores, pero será una sociedad de propósito específico para manejar este tubo”, dijo Gallino.