Buenos Aires — Sergio Massa logró lo que parecía imposible: que un ministro de Economía de un país con 138,3% de inflación interanual, pobreza superior al 40%, reservas netas negativas, dólares paralelos en máximos históricos en términos reales y múltiples desequilibrios macro obtenga un arrollador triunfo electoral. El candidato a presidente de Unión por la Patria se impuso en las Elecciones Generales y competirá por la Presidencia de Argentina frente a Javier Milei en la segunda vuelta el próximo 19 de noviembre.
A pesar de la apremiante situación económica que atraviesa el país, y con más del 83% de las mesas escrutadas, Massa obtenía a las 21:51hs el 36,2% de los votos y se ubicaba así casi seis puntos porcentuales por delante de Milei. De esta manera, se posiciona como favorito para llegar a la Casa Rosada el 10 de diciembre. Para ello, deberá revalidar el triunfo electoral en noviembre.
Massa, que asumió al frente del Palacio de Hacienda en agosto de 2022, no dio señales todavía de quién sería su sucesor al frente de la cartera económica si logra un triunfo en noviembre. Apenas adelantó, días atrás, que el exministro de Economía Roberto Lavagna ocuparía un rol protagónico en un eventual gobierno suyo.
La expectativa de que el expresidente de la Cámara de Diputados ingresaría a disputar la segunda vuelta había crecido con fuerza apenas minutos después del cierre de urnas. En la sede de Massa, el Complejo C del barrio porteño de Chacarita, el clima fue desde temprano de marcado mayor optimismo al que se vio en las elecciones PASO del 13 de agosto.
Ese optimismo se transformó rápidamente en euforia y festejos en la sede del oficialismo apenas después de que se conocieran los primeros resultados oficiales.
Con el triunfo de Massa en las Elecciones Generales parece despejarse, al menos en lo inmediato, la posibilidad de que el equipo económico del Gobierno convalide un nuevo salto abrupto del tipo de cambio, como esperaba el mercado. En cambio, cobra fuerza la posibilidad de que el tipo de cambio oficial permanezca sin cambio hasta mediados de noviembre, para recién ahí retomar el sistema de micro devaluaciones diarias controladas, conocidas como crawling peg, tal como expresaron públicamente en los últimos días su viceministro de Economía, Gabriel Rubinstein, y el director del Banco Central Agustín D´Attellis.
