Buenos Aires — Antes de que empiece mayo, cada director de área del Banco de Inversión y Comercio Exterior (BICE) debe informar un recorte en la plantilla de su sector del 30%. Según pudo saber Bloomberg Línea de una fuente con conocimiento del asunto, que pidió reserva, la decisión fue comunicada el miércoles en las oficinas del banco público argentino situadas en la calle Mitre, en pleno microcentro porteño. Además, desde el próximo mes la presencialidad deberá ser total.
Esta decisión va en línea con la política del presidente Javier Milei de realizar un fuerte ajuste en la dotación de la Administración Pública Nacional.
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El pasado 27 de marzo, el vocero presidencial, Manuel Adorni, precisó que “el universo de contratos analizados es de algo más de 70.000, y hay 15.000 que van a ser baja el 31 de marzo, sin incluir el PAMI y empresas públicas”. “El resto entran en un nuevo proceso que se sigue auditando y se sigue revisando por otro trimestre adicional”, dijo.
Desde el banco no contestaron con inmediatez a la consulta de Bloomberg Línea.
El BICE es un banco público dependiente del Ministerio de Economía que otorga financiamiento de corto, mediano y largo plazo “con foco en los sectores productivos, las pequeñas y medianas empresas y las economías regionales”.
Según el último informe de dotación del personal de la Administración Pública Nacional publicado por el Indec, el banco cuenta con 461 empleados. De los cuales 452 están en convenio colectivo de trabajo. El recorte total que se aspira a realizar en el banco alcanza al 30% del personal, que deberá reflejarse en cada área de la institución.
El Gobierno de Milei designó entre sus autoridades a Juan Manuel Troncoso Iriarte como presidente y al contador Patricio Milic como vicepresidente, mientras que sostuvo a Nicolás Scioli, hermano de Daniel Scioli, como director.