Buenos Aires — El Ministerio de Economía define detalles de lo que será un nuevo aumento en las tarifas de luz y gas; también habrán subas del agua en el Área Metropolitana de Buenos Aires (AMBA) y de la nafta en todo el país por la actualización de los impuestos que se ha realizado de manera diferida.
Economía retomó este mes las actualizaciones mensuales de luz y gas, en los componentes del transporte y la distribución. En agosto la suba fue -en promedio- del 4%, y se prevé un número similar para este mes, según informaron fuentes del Gobierno a este medio.
La novedad es que estas subas se realizan sin ninguna fórmula o mecanismo de ajuste, pese a que la Secretaría de Energía trabajaba en un nuevo esquema. Esto ocurrió tras la decisión del ministro de Economía, Luis Caputo, de derogar las fórmulas que se habían establecido vía decreto a principios del año.
Esas fórmulas para definir las actualizaciones mensuales en los componentes de transporte y distribución -en luz y gas-, que nunca se respetaron (no hubo aumentos en mayo, junio o julio), consideraban tres variables: índice de salarios del sector privado, el Índice de Precios Internos al por Mayor (IPIM) y el Índice del Costo de la Construcción en el Gran Buenos Aires.
Uno de los principales motivos por los cuales Caputo decidió derogar esa fórmula es por considerar que generaba un arrastre de la inflación y de los meses con mayor aumento del IPC, al estar indexada a datos del mes pasado.
Había un compromiso con la Secretaría de Energía de avanzar con una nueva fórmula que nunca se concretó. Las decisiones sobre los aumentos, según afirmaron fuentes del Gobierno a este medio, las toma el Ministerio de Economía.
Bloomberg Línea consultó al Ministerio de Economía respecto a las subas y la nueva fórmula y no obtuvo respuestas.
El lado de las empresas
Desde el lado de las empresas consultadas por este medio, desconocen los parámetros establecidos para definir las subas. No obstante, el Gobierno sostiene el compromiso para avanzar a fin de año con la revisión tarifaria quinquenal que defina el esquema tarifario de los próximos cinco años (2025-2029).
Aún con esta incertidumbre, la recomposición tarifaria de este año le permitió a las compañías del sector mostrar mejores balances tarifarios. En el caso de las distribuidoras de gas que cotizan en el panel general (Distribuidora de Gas Cuyana, Distribuidora de Gas del Centro, Metrogas, Camuzzi Gas Pampeana, Naturgy), todas reportaron un margen operativo positivo, revirtiendo la situación del primer trimestre, en el que había sido negativo: el primer aumento importante de gas se aplicó en abril.
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Por el lado de las energéticas, la principal distribuidora del país, Edenor, reconoció ante los inversores que “los resultados del segundo trimestre se han visto beneficiados sustancialmente de la subida de tarifas aplicada a mediados de febrero de este año, con un EBITDA que ascendió a ARS$77.400 millones en el segundo trimestre de frente a los ARS$27.600 millones del año pasado.
Caída de los subsidios energéticos
Tras los aumentos a principios de año, el Gobierno actualizó en junio los precios fijados al Punto de Ingreso al Sistema de Transporte (PIST - gas) y al Precio Estacional de la Energía Eléctrica (Pest - energía eléctrica), con el objetivo de reducir los subsidios del Estado.
Durante el primer semestre del año, los subsidios al sector energético alcanzaron los US$3.158 millones, una caída del 46% interanual medido en términos reales.
