Inversiones del campo argentino: por qué podrían caer en 2025

A pesar de la significativa baja de la inflación y la estabilidad cambiaria, el segmento no prevé hacer grandes aportes a la reactivación de la actividad económica, según un informe privado

Por

Buenos Aires — El empeoramiento de las expectativas para los próximos 12 meses tanto en la situación financiera de los productores como en lo referido al sector agropecuario en su conjunto, son alguno de los motivos por los que el 65% de los productores manifestó su falta de interés en realizar inversiones en Argentina, de acuerdo con un sondeo del sector privado.

El índice Ag Barometer Austral que elabora el Centro de Agronegocios y Alimentos de la Universidad Austral apuntó también a “la incertidumbre macroeconómica, la falta de financiamiento, el alto costo del financiamiento, la falta de alternativas rentables de inversión y la falta de confianza en el futuro del sector”, como otras de las principales causas por las que deciden no invertir durante el próximo año.

A pesar de la significativa baja de la inflación y la estabilidad cambiaria, los productores en su mayoría piensan que aún no es momento para realizar inversiones en activos fijos y, por lo tanto, uno de los componentes de la Demanda Agregada (Inversión), no hará grandes aportes a la reactivación de la actividad económica, el gran desafío que enfrenta el gobierno”, detalla el informe.

Por qué se espera una merma en las inversiones del campo

La incertidumbre macroeconómica (20%), la falta de financiamiento (20 %), el alto costo del financiamiento (16 %), la falta de alternativas rentables de inversión (14 %) y la falta de confianza en el futuro del sector (12%) son las principales causas de las decisiones de no invertir durante los próximos doce meses, aseguró el sondeo.

VER MÁS: ¿A cuánto debería bajar el riesgo país para que Argentina vuelva a los mercados?

Del 35% de los productores que realizarán inversiones, la gran mayoría lo hará de forma individual (29%) y los rubros elegidos son: maquinarias grandes (42%), hacienda vacuna (33% y principalmente de cría), tierra (23% porque los valores están relativamente bajos) y otras maquinarias (20% en sembradoras y pulverizadoras, entre otras).

A su vez, “la campaña 2024/25 se está desarrollando en condiciones climáticas más desfavorables que las transcurridas durante la campaña 2023/24, y un 55 % de los productores temen la presencia de problemas climáticos importantes”, analizó el sondeo.

“Otro de los datos que llaman la atención de la encuesta es que más de la mitad de los productores agropecuarios (51%) realiza sus actividades en campos arrendados, y la gran mayoría se pagan en una suma fija en quintales, aunque con distintos momentos de pago”, puntualizó.

Para el 76 % de los productores, el pago de los arrendamientos representa el 40% o más de sus costos totales, mientras que para un 48 % la incidencia es del 50 % o más.

Caen las expectativas

En septiembre se dio una caída del 5% (132 vs 139) con relación a la medición pasada: “Esta es la primera caída que se registra desde noviembre 2022, momento en el cual había comenzado a subir levemente”.

“El mayor descenso se registra en el Índice de Expectativas Futuras, al representar un 6% menos, dado que la caída del Índice de Situación Presente sólo es del 1%”, explicó.

“Entre las causas de esta caída hay que mencionar, en primer lugar, la baja de los precios futuros de la soja en la posición para mayo 2025 producto de la gran oferta esperada de la campaña 2024/25, y un importante incremento en la relación Stock/Consumo a nivel mundial para la oleaginosa. En paralelo, en nuestro país se espera un incremento en la superficie sembrada de soja 2024/25 con relación a la campaña producto de una menor superficie dedicada al maíz”, expresó el informe.

VER MÁS: Trump y Milei: cómo se forjó el apoyo del presidente argentino al candidato republicano

De no mediar factores climáticos adversos, el Ag Barometer Austral pronosticó que los cambios en la utilización de la superficies sembradas darían lugar a una producción total de 130 millones de toneladas, aunque con precios más bajos que en la campaña 2023/24, especialmente en soja.

Carlos Steiger, investigador del Centro de Agronegocios y Alimentos y director de la encuesta, subrayó que los productores esperan una campaña agrícola 2024/25 con márgenes muy ajustados, “fundamentalmente para la soja, que será el cultivo con la mayor superficie implantada, y con pocas posibilidades de los productores para transferir parte de esa área al maíz que presenta mejores perspectivas de rentabilidad”.

La demora en las lluvias ha atrasado las siembras de maíz temprano, aunque las últimas precipitaciones del mes de octubre pueden tener un impacto positivo no solo en la siembra de maíz, sino también en los rendimientos de trigo”, argumentó.

VER MÁS: Lo que dicen las últimas encuestas sobre Javier Milei: repunta la confianza en el Gobierno