Impuesto a las Ganancias: La jugada electoral de Massa y cuánto impacta en la recaudación

La medida alcanzaría a los trabajadores de la cuarta categoría, que son poco más de un millón de personas. Efecto en la recaudación y Teorema de Baglini

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Buenos Aires — Sergio Massa busca un golpe de efecto de cara a octubre. El ministro de Economía argentino y candidato a presidente por Unión por la Patria prometió en las últimas horas que bajo un eventual Gobierno suyo los trabajadores ya no pagarán el Impuesto a las Ganancias, e incluso adelantó que mandará un proyecto de ley al Congreso para reglamentarlo, apuntando a que sea efectivo antes de que termine el año.

Pero en caso de implementarse, la decisión comprometerá aún más a las cuentas públicas a no ser que se plantee un mecanismo alternativo de fondeo que compense esa merma en la recaudación. Por ello es que analistas privados plantean interrogantes respecto de su implementación y perdurabilidad, y hasta marcan que la medida refleja las posibilidades de que Massa llegue a la Casa Rosada el próximo 10 de diciembre.

Fuentes de la AFIP dijeron a Bloomberg Línea que la medida aplicaría a los trabajadores de la cuarta categoría, que son poco más de un millón de personas. Aun resta por verse cuándo se enviaría al Congreso y si coincidirá con la presentación del proyecto de ley de Presupuesto 2024, que según adelantaron desde el equipo económico tendría como piedra angular el déficit primario cero.

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Impuesto a las Ganancias y el Teorema de Baglini

“Si aplicamos el Teorema de Baglini, que Massa proponga eliminar el impuesto a las ingresos a los asalariados formales (el mal denominado impuesto a las ganancias) sugiere que está lejos de ganar la elección”, analizó el politólogo y analista senior de Medley Advisors, Ignacio Labaqui.

El analista hizo referencia a la popular teoría a la que desde hace años se hace referencia en Argentina, que sostiene que cuanto más cerca se está del poder, más responsables son las propuestas que enuncia un dirigente. El grado de responsabilidad de las propuestas, decía en 1986 el por entonces diputado radical Raúl Baglini, es directamente proporcional a sus posibilidades de acceder al poder.

“El hecho de que el ministro de Economía proponga eliminar el impuesto a los ingresos de los asalariados formales parece una muestra de desesperación. Si alguien promete algo muy difícil de cumplir lo que está mostrando es que está lejos de ganar la elección. Como está lejos de ganar, puede prometer cualquier cosa y es dudosa la efectividad de esto en materia electoral”, señaló Labaqui.

El economista Sebastián Menescaldi, director de Eco Go, también deja entrever que la apuesta de Massa difícilmente pueda separarse del contexto electoral. Es que según analizó, si se observa la participación del pago de ganancias de personas físicas en la recaudación total, “luce poco probable la propuesta de eliminarla sin contar con otro fondeo”.

Ante este panorama, Menescaldi cree que la medida podría aplicarse de forma temporal, por unos pocos meses. “Lo puede hacer por un mes, dos meses, pero no lo puede hacer total para atrás. Tampoco es que estamos muy superavitarios de recursos, con lo cual lo veo poco probable. Podría llegar a subir el mínimo no imponible, para que alcance a una buena cantidad de personas y con un costo no tan alto. Pero veo poco probable que lo eliminen totalmente”, señaló.

Según sus cálculos las personas físicas aportan, por Ganancias, el 8,5% de la recaudación tributaria. Por ello es que marca que “no es viable” la propuesta a no ser que se trate, a lo sumo, de una medida a aplicarse por lo que resta del año.

Similar diagnóstico hizo el economista Fernando Marull, de FMyA. Expresó que la propuesta de Massa de eliminar ganancias de personas físicas representa “una fortuna” en términos de la presión tributaria de Ganancias como porcentaje del PBI. En total, dijo, si se contempla a los profesionales independientes, los responsables inscriptos y los de cuarta categoría, totalizan un 2,5%. Y calculó que solo los de cuarta categoría, representan alrededor de un punto del producto.

En los últimos seis años (2017-2022), agrega Salvador Vitelli, economista jefe de Romano Group, el impuesto a las Ganancias recaudó en promedio 1,9% del PIB. El último dato oficial disponible -correspondiente al mes julio-, agregó, dejó una percepción neta de $255.000 millones y $702.577 millones devengados. Pero dicha cifra, marcó, es la recaudación bruta y no incluye reintegros y devoluciones. Por eso, dijo, es que prefiere mirar los $255.000 millones netos.

Quiénes integran la cuarta categoría de Ganancias

Según el Artículo 78 de la ley de Ganancias, la cuarta categoría está conformada por empleados:

a) Del desempeño de cargos públicos;

b) Del trabajo personal ejecutado en relación de dependencia;

c) De las jubilaciones, pensiones, retiros o subsidios de cualquier especie en cuanto tengan su origen en el trabajo personal y de los consejeros de las sociedades cooperativas;

d) De los servicios personales prestados por los socios de las sociedades cooperativas mencionadas en la última parte del inc. e) del art. 45 que trabajen personalmente en la explotación, inclusive el retorno percibido por aquellos;

e) Del ejercicio de profesiones liberales y de funciones de albacea, síndico, mandatario, gestor de negocios, director de sociedades anónimas y fideicomisario;

f) Los derivados de las actividades de corredor, viajante de comercio y despachante de aduana.