Buenos Aires — Esta semana el Gobierno Nacional avanzó en un importante cambio respecto a las facultades de la Compañía Administradora del Mercado Mayorista Eléctrico (Cammesa), empresa mixta dirigida por la Secretaría de Energía que fue fundada en la década de 1990 pero que a partir del 2005 empezó a tener una mayor intervención en el sector.
La resolución 150 publicada esta semana en el Boletín Oficial, derogó la resolución 2022 del año 2005 que definió los alcances de las “Instrucciones y Mandatos Regulatorios” y de la “Instrucción por Cuenta y Orden” que se darían a CAMMESA, según resumió la consultora Aleph Energy en un informe.
Es un paso más que da el Gobierno en su intención de desregular el sector de energía eléctrica y de eliminar el rol interventor que asumió Cammesa. En el mediano plazo, Energía apunta, por caso, a que las generadoras de energía eléctrica acuerden los contratos directamente con las distribuidoras.
Eso será más adelante. Ahora, con los cambios dispuestos, Cammesa volverá a su rol original de administrador del Mercado Eléctrico Mayorista y operador del SADI, dentro de las leyes 15336 y 24065, y dejaría de elaborar regulaciones del mercado, comprar combustibles, importar combustibles, firmar contratos de abastecimiento MEM, y dejar de actuar en nombre del Estado Nacional en cualquier tema del sector eléctrico, agregó Aleph Energy.
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Desafíos en el sector
Esto trae desafíos en el corto plazo. “En las pésimas situaciones económicas y financieras actuales, es muy complicado que un generador pueda comprar su propio combustible y financiar esa compra a 2 o 3 meses, que es el plazo en que pagaría la demanda/subsidios a través de Cammesa”, dice la consultora que dirige Daniel Dreizzen, y agrega que “será necesario que la Secretaría de Energía encuentre una solución rápida, que podría pasar por que ENARSA sea el comprador hasta que el mercado funcione normalmente”.
Para Juan José Carbajales, director de la consultora Paspartú, entre los desafíos que genera este cambio dispuesto por el Gobierno está el nivel de subsidios, si se paga a generadores o se pasa a la demanda. “Nada de todo esto será sencillo resolver en el corto plazo. Máxime en la nueva dinámica entre la Secretaría de Energía y la flamante Coordinación de Economía”, dijo el exsecretario de Hidrocarburos en la red social X.
La mirada del sector
“A partir del 2004, 2005, Cammesa se transformó en una especie de ente monopólico que compra todos los combustibles, toda la logística de todos los combustibles para generar energía, se apropia de toda la generación de energía eléctrica y toda la puesta en disposición de potencia, la entrega y la cobra y asigna esos costos de un modo no de mercado, como un actor monopólico”, señala Juan Bosch, CEO de SAESA, empresa de suministro de gas.
Según Bosch, esa función de Cammesa derivó en una pérdida importante dinero que derivó a su vez en que esa pérdida represente un porcentaje importante de los subsidios energéticos y que Argentina pase a ser en un país con déficit energético. “Pasamos de ser un país con enormes recursos naturales a tener un problema muy grande de déficit energético que explica en gran medida el déficit fiscal del Estado”.
El CEO de SAESA sostiene que estos cambios buscan ir “hacia un mercado transparente, competitivo, con multiplicidad de actores y garantizando la energía confiable más competitiva posible y que todos los consumidores tengan derecho a elegir su proveedor en un marco de transparencia”.
“Esta resolución, que ha hecho mucho ruido pero es un poco una sutileza, lo que hace es ratificar un rumbo, el Estado le dice a la empresa ‘no espere usted de mí ninguna instrucción regulatoria porque usted no la va a recibir’”, explicó Bosch.
“Los veinte años que llevamos de abandono de una estrategia de mercado nos llevaron a una hecatombe, a una hecatombe eléctrica, que terminamos con un sistema muy frágil”, agregó Bosch.
