Gobierno argentino niega otra devaluación y da pistas de la inflación que viene

Caputo dijo adelantó que “ya es casi un dato” que la inflación de enero se ubicará en torno al 20% y dejó entrever que no convalidará otro salto cambiario. Qué espera el mercado

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Buenos Aires — El Gobierno argentino niega que vaya a convalidar otra devaluación y da pistas de la inflación que viene. La visión oficial para las dos variables, sin embargo, se desacopla de la que prevalece entre inversores y analistas privados, que no terminan de convencerse de que el programa económico implementado por Luis Caputo pueda ofrecer los resultados deseados en el corto plazo. En especial, si se tiene en cuenta que el propio ministro de Economía fue quien, apenas dos meses atrás, advirtió que el Gobierno estaba ante “la peor herencia de la historia”.

En las últimas horas, Caputo expresó en su cuenta de X que “ya es casi un dato” que la inflación de enero “va a estar en torno al 20%”. Esta semana, en una entrevista con LN+ ya había dejado entrever que en el equipo económico estaban trabajando con supuestos de inflación de 14% en febrero y del 9% en marzo.

Con esos datos, el titular del Palacio de Hacienda apuntó a desalentar las expectativas de un nuevo salto abrupto del tipo de cambio. Asumiendo esos niveles de inflación, explicó, el tipo de cambio real de fin de marzo sería de 117 si se utilizaba como base 100 el tipo de cambio real de la salida del cepo, en diciembre de 2015.

El cálculo de Luis Caputo, sin embargo, fue interpretado por algunos analistas como un anticipo de que el crawling peg del 2% mensual podría estar llegando a su fin en el corto plazo. Ocurre que, hasta el miércoles, el Índice de Tipo de Cambio Real Multilateral mostraba que ya en febrero esa ponderación se ubicaba en 117. Ayer, sin embargo, esa serie fue corregida al actualizar los datos de inflación con los últimos del Relevamiento de Expectativas del Mercado y quedó, al 7 de febrero, en 121,7.

Aun así, Pablo Repetto, jefe de research de Aurum Valores, calculó que si el índice de tipo de cambio real ya estuviera en 117 a esta altura del mes –como mostraba el ITCRM hasta el miércoles–, y se proyectara una inflación de 14% en febrero y 9% en marzo, para que el índice llegue en 117 a fines de marzo debería observarse una aceleración del crawling a un rango de entre el 15 y el 16% en marzo. “Si las tasas de inflación fueran más altas obviamente el ritmo de crawling peg para llegar a los 117 debería ser más alto”, marcó.

Si en cambio, si se mantuviera el crawling peg del 2%, hacia fin de marzo, calculan desde Aurum Valores, el tipo de cambio real multilateral se ubicaría debajo del nivel que tenía antes de la PASO de 2019. El 9 de agosto de aquel año, último día anterior a las primarias, el ITCRM se ubicó en 112,5.

Desde el Ministerio de Economía no respondieron a los pedidos de comentario por parte de Bloomberg Línea sobre esta dinámica.

Lo cierto, sin embargo, es que según pudo saber este medio, hace un mes desde el equipo económico le habían anticipado a representantes de bancos que el programa buscaba una apreciación real del tipo de cambio y pusieron como referencia el valor del tipo de cambio real de febrero de 2016. Ese mes, el ITCRM lo inició en 98,1, mientras que en promedio el índice se ubicó en 102,5.

En el mercado, en cambio, la expectativa es otra. Si bien los analistas confían en que el equipo económico no convalidará un salto abrupto del tipo de cambio en el corto plazo, la curva de dólar futuro refleja que las expectativas de devaluación crecen con fuerza a partir de abril.

Según datos de Andrés Reschini, de F2 Soluciones Financieras, la devaluación implícita en futuros se ubica en 2% en febrero y 4,9% en marzo antes de saltar por encima del 10% en abril, mayo y junio.

El último Relevamiento de Expectativas del Mercado (REM), por su parte, mostró que los analistas proyectan que el tipo de cambio cerrará febrero en $839,7; marzo en $909; abril en $1.080; mayo en $1.173,3 y junio en $1.258,3. Si eso ocurriese, el ritmo de devaluación se mantendría por debajo del 2% solo en febrero (1,5%) antes de saltar a 7,6% en marzo, 15,8% en abril, 7,9% en mayo y 6,7% en junio.

Los analistas que consulta el Banco Central también fueron algo más cautos en cuanto a las expectativas de desaceleración de la inflación. Al respecto, proyectaron 21,9% para enero, 18% para febrero y 15,3% en marzo. El Índice de Precios al Consumidor, estimaron, recién caería a niveles de un dígito en junio, mes para el que prevén un 8,2%.