Buenos Aires — El presidente Javier Milei le comunicó este martes a los veintitrés gobernadores y al jefe de Gobierno de la Ciudad de Buenos Aires que enviará un proyecto al Congreso para reintegrar el impuesto a las Ganancias para la cuarta categoría de asalariados. Y que no coparticipará el impuesto al cheque.
Escuchó el reclamo de cada dirigente, pero no dio demasiadas precisiones respecto al Decreto de Necesidad y Urgencia (DNU) que se espera para estas horas y sobre los proyectos que en los próximos días se enviarán al Congreso.
“Es muy importante la reunión que tuvimos”, dijo Martín Llaryora, gobernador de Córdoba, quien pese a marcar que “estamos en un momento muy difícil”, resaltó que la reunión llevada a cabo era un evento “que hace muchos años que institucionalmente la Argentina no tenía”.
La asistencia fue perfecta. Milei realizó un breve diagnóstico de los primeros días de gestión y escuchó a cada uno de los mandatarios provinciales. El encuentro duró dos horas y media y tras escucharlos, les dijo que no acepta la propuesta de coparticipar el impuesto al cheque pero sí impulsará el impuesto a las Ganancias para la cuarta categoría. Lo confirmó luego el presidente de la Cámara de Diputados, Martín Menem, que participó de la reunión con gobernadores.
Ese impuesto se quitó en el Congreso en septiembre, antes de las elecciones generales. Como diputado, Javier Milei votó a favor de eliminarlo. Sin embargo, ahora enviará un proyecto a Diputados para que se vuelva a percibir ese tributo con el objetivo de aumentar la recaudación.
Según el tributarista Cesar Litvin, de Lisicki, Litvin & Asociados, el aporte de los asalariados en el impuesto a las Ganancias tiene un impacto del 2% del Producto Bruto Interno (PBI) en la recaudación.
El compromiso de Milei sería el de revisar este tributo en cada discusión de presupuesto, al final de cada año.
La devolución que Milei se llevó de los gobernadores, más allá de los reclamos escuchados, no fue mala. “Todos los gobernadores, más allá de las diferencias ideológicas, le manifestamos al presidente que lo queríamos acompañar, que queríamos trabajar en conjunto”, dijo Llaryora ante la prensa.a devolución que Milei se llevó de los gobernadores, más allá de los reclamos escuchados, no fue mala. “Todos los gobernadores, más allá de las diferencias ideológicas, le manifestamos al presidente que lo queríamos acompañar, que queríamos trabajar en conjunto”, dijo Llaryora ante la prensa.
La posición de Llaryora no es representativa del total de los mandatarios: no forma parte de Juntos por el Cambio ni de Unión por la Patria, y su espacio aportó con tres figuras a la administración de Milei. Sin embargo, no fue contradicho por ninguno de los dos gobernadores que lo acompañaron: Gustavo Saénz (Salta) y Raúl Jalil (Catamarca).
“Hay que terminar con la cultura de la polémica y comenzar con la cultura del diálogo”, dijo Jalil, peronista de Unión por la Patria (UxP), cuya firma apareció horas después en un comunicado de La Liga de los Gobernadores (ocho gobernadores de UxP), que critica las primeras medidas del Gobierno de Milei y rechazan la decisión de restaurar el impuesto a las Ganancias y no coparticipar el impuesto al cheque.
Próximos movimientos
Milei fue a buscar apoyo de los gobernadores para dos actos que ocurrirán en estas horas. Los efectos del Decreto de Necesidad y Urgencia (DNU) que busca desregular distintos aspectos de la economía argentina y el envío del proyecto de reformas que se discutirá durante estos días en el Congreso, luego de que se convoque a sesiones extraordinarias. El presidente explicará los alcances del DNU en cadena nacional.
La prioridad estará en las reformas económicas y serían más de un proyecto, dijo Martín Menem, pero ayer no descartó que además se incluyera el proyecto de reforma electoral para eliminar las Primarias Abiertas, Simultáneas y Obligatorias (PASO) y promover la boleta única de papel.
El apoyo lo necesitarán para no encontrar trabas en el Congreso. En estos momentos se están definiendo las composiciones de las comisiones. La más urgente es la comisión bicameral de Trámite Legislativo que discute los DNU del Poder Ejecutivo.
La Comisión Bicameral Permanente está integrada por ocho diputados y ocho senadores y debe expedirse acerca de la validez o invalidez de los DNU y elevar el dictamen al plenario de cada Cámara para su tratamiento.