Buenos Aires — El Gobierno de Javier Milei apuntó contra la oposición tras el rechazo del DNU para aumentar los fondos reservados asignados a la Secretaría de Inteligencia del Estado (SIDE). Apenas unas horas después de que el Senado rechazara con dos tercios de los votos el Decreto de Necesidad y Urgencia (DNU) que disponía el traspaso de fondos reservados por ARS$102.000 millones para la SIDE, la Oficina del Presidente emitió un duro comunicado en el que condenó el “voto irresponsable de un grupo de legisladores que dejaron al Sistema de Inteligencia argentino sin recursos en un momento histórico del país”.
De acuerdo a la visión oficial, la agencia de inteligencia durante décadas fue “utilizada para actividades espurias” como el espionaje interno, el tráfico de influencias y la persecución política. Pero ahora, señala el comunicado, el presidente Javier Milei buscaba reformar el Sistema de Inteligencia “con un perfil profesional, abocado en la protección del pueblo argentino de amenazas tanto internas como externas, saldando una de las grandes deudas de la democracia”.
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Sin embargo, en el oficialismo consideraron que en las últimas horas, nuevamente, “los intereses personales atentaron contra la posibilidad de tener un organismo de inteligencia que tenga la capacidad y los recursos para cuidar a los argentinos”. Por ello, responsabilizó a “los responsables del desfinanciamiento del Sistema de Inteligencia”, de quienes dijo que “deberán hacerse cargo de cualquier hecho que pueda ocurrir hasta que la SIDE esté correctamente financiada y pueda recuperar sus capacidades vitales”.
Por ello, la Oficina del Presidente consideró que “el Senado el que le falló al pueblo argentino”.
Y advirtió: “El kirchnerismo y el radicalismo, que deberá decidir si es parte de la transformación de la Argentina o es parte de lo peor del pasado, rechazaron una ampliación de fondos que simplemente buscaba llevar el presupuesto de la Secretaria de Inteligencia (SIDE) al nivel del promedio histórico, y que tenía por objetivo garantizar su normal funcionamiento”.
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Fondos reservados: más de US$3.600 millones en 30 años
El 23 de julio pasado, el Gobierno de Milei publicó en el Boletín Oficial el DNU 656, que dispuso asignar adicionalmente al presupuesto general de la administración nacional la suma ARS$100.000 millones, destinados a fortalecer el Sistema de Inteligencia Nacional.
Según se desprende de datos proporcionados por la Secretaría de Inteligencia del Estado, presentados por el Gobierno ante la Cámara de Diputados en el último Informe de Gestión, de haberse aprobado esos aproximadamente US$102,1 millones que asignaba el DNU, los fondos reservados hubieran trepado por encima del promedio de los últimos 30 años (US$122 millones). Habría alcanzado los US$145,4 millones, superando todos los registros de fondos reservados asignados a la SIDE desde 1999.
Pero con el rechazo por parte del Senado, se abre el interrogante respecto de qué pasará con esos fondos. De acuerdo a información oficial disponible en la página de Presupuesto Abierto, el presupuesto vigente destinado la SIDE supera los ARS$136.741 millones, de los cuáles ya se ejecutaron ARS$102.284 millones (74,8%). De esa cifra, unos ARS$103.438 millones corresponden a gastos reservados, de los cuales se devengó ya un 78,5% (ARS$81.056 millones), cifra que equivale a unos US$84,3 millones al tipo de cambio oficial mayorista y que supera los fondos reservados que recibió la Secretaría de Inteligencia en los últimos siete años.
De acuerdo a las cifras proporcionadas por la SIDE, el período en que más fondos reservados recibió fue durante la presidencia de Carlos Menem: entre 1995 y 1999 recibió un promedio anual de US$263,7 millones. Luego, cayó a US$154 millones de promedio anual durante el Gobierno de Fernando de la Rúa; a US$83,7 millones anuales en la presidencia de Néstor Kirchner; trepó a casi US$118 millones por año durante los dos mandatos de Cristina Fernández de Kirchner; y volvió a caer a US$84,9 millones anuales con Mauricio Macri; y a US$49,4 millones promedio por año bajo la gestión de Alberto Fernández.
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De esta manera, revela el documento oficial, los fondos reservados enviados a la SIDE superan los US$3.660 millones en los últimos 30 años. Los fondos reservados, argumentó el informe de gestión, representaban al 10 de diciembre pasado apenas el 10% del presupuesto total de la AFI, luego reconvertida en SIDE. “Un organismo, que no producía inteligencia”, señaló.
Los fondos de carácter reservado, agregó el mencionado informe de gestión, son aquellos utilizados para realizar labores de inteligencia. Las partidas presupuestarias públicas, en cambio, son las que se destinan al funcionamiento estructural básico del organismo. “Con los fondos públicos de la Secretaría de Inteligencia de Estado se abona la electricidad, los seguros de incendio, el mantenimiento de los ascensores, el papel para las impresoras y los gastos corrientes de ponerlo en funcionamiento básico”, ejemplificó. “Sin fondos reservados, la Secretaría de Inteligencia de Estado no cumple con su función de inteligencia”, subrayó el documento presentado ante la Cámara de Diputados.