Buenos Aires — La portavoz del Fondo Monetario Internacional (FMI), Julie Kozack, afirmó este jueves, 13 de julio en una conferencia de prensa que los países pueden utilizar cinco monedas para saldar sus obligaciones con el organismo, y que entre ellas se encuentra el yuan chino (RMB).
Argentina utilizó esa moneda para pagar parte de los US$2.700 que vencían con el organismo en junio. Mientras el equipo económico sigue negociando un nuevo acuerdo con el FMI ante el incumplimiento de las tres metas vinculantes del programa vigente, se especula que el Gobierno podría volver a hacer uso del tramo de libre disponibilidad de su swap de divisas con China para pagar los US$2.657 millones que vencen con el Fondo este mes.
Las negociaciones, sobre las cuales Kozack no brindó detalles ni en relación al contenido ni a los plazos, se producen en un contexto en el que las reservas netas del Banco Central de la República Argentina (BCRA) se estiman en el entorno de los -US$6.000 millones.
Kozack no respondió a la pregunta de Bloomberg Línea respecto a una supuesta discrepancia entre Argentina y el Fondo en relación a la meta de déficit fiscal primario para este año. Por el momento rige la meta actual, de 1,9% del PBI.
Según indicó la portavoz oficial del Fondo, el pago de Argentina al FMI en junio en moneda china (RMB) consistió en una práctica habitual, a la que pueden acudir los países miembros. Kozack también afirmó que, a la fecha, Argentina sigue cumpliendo con sus compromisos financieros con el FMI.
Asimismo, sostuvo que los equipos técnicos del organismo y de las autoridades argentinas han estado trabajando intensamente para completar la quinta revisión del programa económico acordado en 2018 y para ayudar al país a enfrentar una situación “compleja y desafiante”.
Kozack señaló que el foco de las discusiones ha sido buscar alternativas para fortalecer el programa de las autoridades, reconociendo el impacto de la sequía en la economía. Esto incluye conversaciones sobre políticas para preservar la estabilidad mediante el aumento de las reservas y la mejora de la sostenibilidad fiscal, protegiendo al mismo tiempo a los sectores más vulnerables de la población.
La portavoz del FMI evitó dar detalles sobre el contenido de las negociaciones, ya que aún están en curso, y dijo que se comunicarán más detalles cuando los haya. Asimismo, desmintió la existencia de una carta del FMI al gobierno argentino con condiciones para el acuerdo, como se había especulado en algunos medios.
Finalmente, ante una pregunta sobre el plazo para alcanzar un acuerdo antes del receso del directorio del FMI a finales de julio, Kozack reiteró que los equipos están trabajando intensamente con el objetivo de avanzar en la quinta revisión. No obstante, no dio una fecha precisa para la conclusión de las negociaciones.
