Buenos Aires — En Argentina circulan 9.738,6 millones de monedas, que en su conjunto tienen un valor apenas superior a los ARS$8.982 millones. La cifra permanece intacta desde abril de 2022, producto que desde hace años su valor por el peso del metal es superior al de la denominación que llevan. Casa de Moneda hace meses que dejó de producirlas y el Banco Central (BCRA) ahora busca empezar a deshacerse de ellas. Para ello, lanzó una subasta pública en la que ofrecerá monedas de curso legal al mejor postor el próximo 21 de noviembre.
El remate se realizará de manera online en la web del Banco Ciudad. Según pudo saber Bloomberg Línea, se subastarán unos 1.500 tambores que contienen unas 100.000 monedas cada uno. Entre los lotes hay monedas de ARS$2 de curso legal, que no serán desmonetizadas aunque el pliego sí especifica que deberán ser deformadas, pese a que el artículo 283 de la Ley 11.179 del código penal lo prohíbe.
Las condiciones fueron publicadas en el Portal de Proveedores del BCRA el lunes, mismo día en que se conoció que Casa de la Moneda informó a sus empleados que suspendería la impresión de billetes luego de que el Central le informara a la imprenta pública la rescisión parcial de contratos para la provisión de billetes de ARS$1.000 y ARS$2.000.
También pueden verse, con mayor detalle, en la página de subastas del Banco Ciudad, donde queda reflejado que cada lote integrado por 10 tambores metálicos cerrados sobre pallets de madera, conteniendo en su interior un total de 1.000.000 de monedas de ARS$2, tiene como precio base ARS$ 43.900.000. Esto implica que por cada moneda de ARS$2, el BCRA puso un precio base de ARS$43,9.
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Por la aceleración de la inflación y la nominalidad de la economía, en los últimos años las monedas prácticamente dejaron de tener valor en el intercambio entre personas, comercios y bancos. Pero siguen teniéndolo para chatarreros que convierten esas monedas en metal.
Según pudo saber este medio de una fuente con conocimiento del sector, que pidió reserva, no todas las monedas tienen valor para su fundición. Las electrodepositadas, precisó, prácticamente no tienen valor metálico. Son las que emitió el BCRA durante el Gobierno de Mauricio Macri que llevan la imagen de árboles característicos del país, con denominaciones de ARS$1, ARS$2, ARS$5 y ARS$10.
Las que no son electrodepositadas, en cambio, sí lo tienen por el peso del metal. Entre estas últimas figuran las de ARS$2 con anillo dorado y núcleo plateado.
Antecedente
En octubre de 2022, durante la gestión de Miguel Pesce, el Banco Central argentino ya había mostrado su intención de desprenderse de un importante lote de monedas vía subasta pública. En aquella oportunidad, se disponía a rematar en la web del Banco Ciudad unas 962 toneladas de monedas, por un precio inicial de ARS$522 millones.
Sin embargo, en aquel momento la autoridad monetaria argentina terminó dando marcha atrás. Ocurre que si bien en Argentina la fundición de monedas se convirtió en negocio informal, esa actividad está prohibida por ley.
Según establece el artículo 283 de la Ley 11.179 del código penal, “será reprimido con reclusión o prisión de uno a cinco años, el que cercenare o alterare moneda de curso legal y el que introdujere, expendiere o pusiere en circulación moneda cercenada o alterada”.
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