Buenos Aires — El Estado argentino pagará el equivalente a US$200.000 por cada partido amistoso que juegue la selección en este 2023. A pesar de que cada vez son más las voces que alertan por las cuentas públicas en la Argentina, el Gobierno Nacional declaró a los amistosos de la selección como “eventos de interés relevantes”, por lo que podrán verse a través de la Televisión Pública.
La decisión se formalizó este lunes 20 de marzo a través de la Resolución 228/2023 publicada en el Boletín Oficial. Y fue aprobada la semana pasada por el directorio de Radio y Televisión Argentina (RTA), apenas unos días después de que el Gobierno argentino alcanzara un acuerdo con el staff técnico del Fondo Monetario Internacional (FMI) para flexibilizar la meta de acumulación de reservas.
Según pudo saber Bloomberg Línea de una fuente con conocimiento en el asunto, el Estado deberá abonar más de $40 millones (aproximadamente US$200.000 al tipo de cambio oficial mayorista) por los derechos de transmisión de cada uno de los partidos amistosos que dispute la selección campeona del mundo en este 2023. El próximo jueves, cabe recordar, el conjunto albiceleste enfrentará a Panamá, mientras que el martes próximo recibirá a Curazao.
Hace apenas unos meses, el Estado pagó US$8 millones para transmitir 32 partidos del mundial. Es decir, unos US$250.000 por partido. El motivo por el que el monto a pagar se pactó en dólares, agrega la fuente, se debe a que los derechos son de la FIFA.
Ahora resta por verse si la TV Pública logra recuperar la inversión realizada. La transmisión de la última Copa del Mundo disputada en Catar, cabe recordar, terminó siendo rentable gracias a que alrededor de un 20% de los ingresos publicitarios fueron aportados por fondos provinciales, organismos o empresas públicas.
Explicación oficial
Según explicó el jefe de Gabinete, Agustín Rossi, en redes sociales, la decisión llegó después de que la Televisión Publica Argentina intentara en las últimas semanas adquirir los derechos de transmisión a Torneos y Competencias, tal como ocurrió para el mundial de Qatar 2022. “En esta ocasión, las cosas fueron distintas. Intentamos comprar los derechos y recibimos resistencias, ninguneos y excusas”, apuntó Rossi. “Así, hasta hoy, los partidos de la Selección solo se podrían ver por la señal de TyC Sports, canal privado del que el Grupo Clarín es accionista”, añadió.
Por estos motivos, indicó Rossi, es que el Gobierno decidió establecer que todos los partidos de la selección sean declarados eventos deportivos de interés relevante, en el marco de las competencias que la Ley de Servicios de Comunicación Audiovisual le confiere a la Jefatura de Gabinete de Ministros.
“Esta decisión garantiza el derecho de acceso universal a los contenidos de los partidos. Si la empresa no cumpliese, se podrán aplicar las penalidades que las actuaciones determinen, que pueden llegar hasta su exclusión del registro como empresas prestadoras de servicios audiovisuales”, advirtió.
Por último, el jefe de Gabinete recordó: “Hace tres meses vimos y sentimos la emoción de un pueblo campeón del mundo. Esta semana, más de un millón y medio de personas intentaron comprar una entrada para volver a ver a la Selección en casa. No es necesario abundar en el significado de estos partidos para nuestro pueblo”.