Buenos Aires — El mundo bursátil suele ser observado desde cierta distancia por muchos individuos, al considerar que la Bolsa es un espacio solo apto para sofisticados. Sin embargo, con buen asesoramiento, el mercado financiero tiene lugar para distintos tipos de participantes: los conservadores, los moderados y los arriesgados. La clave es conocer el propio perfil y horizonte de inversión y no ir más allá de lo que el estómago resiste.
En ese sentido, el mercado argentino tiene una variedad de productos que permiten encontrar su lugar tanto a quienes buscan cubrirse del dólar y la inflación y obtener apenas un pequeño rendimiento por encima de estas dos variables, como para el experto que estudia balances y trata de que sus tenencias rindan cada vez más.
A continuación, algunos de los productos más populares de la Bolsa de Buenos Aires, que pueden ser comprados abriendo una cuenta en un Agente de Liquidación y Compensación (ALyC).
Las obligaciones negociables (ON)
Los bonos corporativos u obligaciones negociables son instrumentos de deuda que emiten las empresas para financiar su desarrollo y pertenecen al universo renta fija. Estos bonos, que nacen mediante licitaciones pero luego pueden ser comprados y vendidos en el mercado, pagan un interés determinado y su capital un vencimiento estipulado (aunque algunas van devolviendo el capital en forma de amortizaciones).
El mercado argentino cuenta con obligaciones negociables en pesos (ajustables por tasa, ajustables por inflación o ajustables al dólar oficial, también llamadas dollar linked) y en dólares. No obstante, las ON en dólares pueden ser suscriptas en pesos.
En particular, las ON en dólares se han vuelto un instrumento muy atractivo para inversores de perfil conservador a moderado, ya que les permite estar atados a los movimientos del dólar paralelo y, además, obtener un rendimiento que en muchos casos está por encima de la inflación en Estados Unidos.
Hay ON argentinas que dan muy bajo rendimiento, ya que se trata de empresas muy sólidas (Arcor, Tecpetrol, Vista) y otras que tienen incorporado algo más de riesgo y, a la vez, rinden más (las de YPF, Mastellone o Telecom son algunos ejemplos).
De ser necesario, el inversor puede vender las ON en caso de que se necesite el dinero antes del vencimiento. Al momento de venderlas pueden estar más caras o más baratas respecto de cuándo las compraron.
Bonos soberanos
Siguiendo con el universo renta fija, así como las empresas emiten bonos corporativos (ON), los países emiten bonos soberanos y las provincias bonos subsoberanos. Estos bonos pagan un interés determinado por el contrato. No obstante, hay otras variables importantes de mirar en los bonos, como la tasa interna de retorno (TIR), que está determinada por el precio que tiene el bono en el mercado y la duración del mismo, entre otras variables.
El bono soberano suele ser una inversión conservadora, pero no en Argentina, donde el riesgo permanente de default hace que los bonos soberanos en dólares sean una inversión de riesgo.
Sin embargo, actualmente los bonos argentinos en dólares están en precios tan bajos que pueden ser una inversión apetecible para quien tiene un horizonte de largo plazo. Los bonos soberanos argentinos más cortos que hay hoy en el mercado vencen en 2029 (AL29 o GD29), pero también hay alternativas a 2030, 2035, 2038, 2041 y 2046.
Nuevamente, no es necesario esperar al vencimiento. Se puede comprar un bono hoy y venderlo cuando uno necesite el dinero (para ello, es importante consultar al asesor que se trate de un bono con buena liquidez).
Los bonos soberanos en dólares permiten al inversor dolarizar su cartera, pero una mala noticia en términos de solvencia argentina puede derrumbar sus precios, así como está siempre latente la oportunidad de que el gobierno de turno decida defaultear. La parte positiva es que sus cotizaciones están tan por el piso, que una buena noticia para el mercado puede hacer saltar su precio.
Los bonos argentinos en dólares son muy utilizados en el mercado para comprar dólar mediante la operación llamada MEP o contado con liqui. El inversor compra la especie en pesos y luego la vende en dólares al otro día.
Además, el Estado argentino emite también bonos en pesos que pueden ajustar por tasa, por inflación o por variación del dólar oficial (dólar linked). Aquí el riesgo de default es más acotado (aunque en 2019 hubo un reperfilamiento para estos instrumentos, es decir, una postergación compulsiva por parte del emisor (el Estado).
Acciones del Merval
Yendo al universo de renta variable, podemos encontrar las acciones de empresas. En este caso uno no está comprando un bono de deuda, sino que está comprando un partecita de la compañía. La ganancia no se da por el cobro de un interés, sino porque el precio de la acción suba o baje, aunque también hay empresas que pagan dividendos.
Al operar en el Merval es importante tener en cuenta que, como el peso argentino pierde valor constantemente, la ganancia en moneda local nos dice poco respecto de cómo le fue a nuestra inversión. Lo ideal es calcular el precio de la acción en dólares y saber si, al final del camino, ganamos o perdemos en moneda dura.
La inversión en acciones requiere un horizonte de mediano a largo plazo, salvo para los traders expertos, y está sujeta a volatilidad. Al igual que en cualquier rubro es importante asesorarse antes de invertir, aunque también es bueno poder interiorizarse respecto de la situación en la que está la empresa en la que uno quiere invertir, para que la ganancia no esté sujeta al factor suerte.
Sin embargo, en Argentina tiene un gran peso el factor político. Una acción puede derrumbarse porque se impone en elecciones una opción reacia al mercado o puede subir porque gana un candidato más amigable para el sector financiero.
Cedear
Los Cedears (Certificados de Depósito Argentinos) son instrumentos financieros que permiten a los inversores argentinos acceder a acciones de empresas extranjeras que cotizan en el exterior. Estos certificados representan la tenencia de acciones de compañías internacionales o de fondos cotizados (ETF) y se negocian en la Bolsa de Comercio de Buenos Aires.
Es decir, mediante estos instrumentos se puede invertir en renta variable en compañías líderes internacionales como Amazon, Apple, Microsoft, Coca - Cola, Mercado Libre, entre otras. Y se pueden comprar y vender en pesos.
Hay dos variables que determinan el precio de un Cedear:
- Precio de la acción subyacente: El precio de un Cedear está directamente relacionado con el precio de la acción subyacente en el mercado internacional. Si el precio de la acción sube, el Cedear también aumenta y viceversa.
- Tipo de cambio: Dado que los Cedears se cotizan en pesos argentinos pero representan la tenencia de acciones extranjeras, los movimientos en el tipo de cambio entre el peso argentino y la moneda extranjera correspondiente pueden influir en el precio del Cedear. Si el tipo de cambio se deprecia, el precio del Cedear en pesos argentinos tiende a subir, y si el tipo de cambio se aprecia, el precio del Cedear tiende a bajar.
Esta opción se ha popularizado enormemente en el mercado argentino, al punto de que tres cuartas partes de lo que se opera en renta variable en la Bolsa porteña corresponde a Cedear. Es decir, estos papeles han superado ampliamente a las propias acciones argentinas en términos de volumen.
Instrumentos para manejo de liquidez
Muchos ahorristas tienen un dilema: cuando empieza el mes pagan la tarjeta de crédito, compran dólares o suscriben un plazo fijo y no saben qué hacer con la plata restante. No la pueden invertir, ya que la necesitan en el corto plazo, pero saben que en una caja de ahorro su valor se deprecia constantemente por la inflación.
Existen algunos instrumentos para aminorar esa pérdida de valor y no dejar de tener el dinero a mano:
- Fondos money market: Permiten colocar el dinero a una determinada tasa de interés y rescatarlo en el instante, cuando se lo necesita. El rendimiento que dejan claramente pierde contra la inflación, pero protegen de una parte de la misma, a diferencia de la caja de ahorro, que es todo pérdida. Se trata de instrumentos ultraconservadores.
- Cauciones bursátiles: Se los suele llamar, coloquialmente, “el plazo fijo de la Bolsa”. Permiten prestar plata a muy corto plazo, por un interés predeterminado. Hay cauciones en pesos y en dólares.