Buenos Aires — La tensión cambiaria recobró protagonismo en el tramo final de la campaña electoral. Cuando faltan solo cuatro días para la segunda vuelta que definirá al próximo presidente de la Argentina, el dólar blue llegó a venderse a $1.000 este miércoles antes de recortar la suba y cerrar en $950 para la compra y $970 para la venta, unos 45 pesos por encima del cierre del martes.
La divisa que se opera en el mercado informal volvió a acercarse así al pico de $1.100 que había tocado antes de las elecciones generales del 22 de octubre. De esta manera, deja atrás la relativa calma que había mostrado hasta hace apenas una semana, cuando llegó a venderse incluso por debajo de los $900. Con este incremento la brecha cambiaria vuelve a ampliarse hasta la zona de 174%.
El incremento del dólar blue se da después de que el Gobierno argentino decidiera poner fin al congelamiento que había aplicado al tipo de cambio oficial mayorista. Tal como venían anunciando desde el equipo económico, este 15 de noviembre el Banco Central (BCRA) convalidó un incremento de tres pesos para el dólar oficial, luego de tres meses en los que lo mantuvo anclado en $350.
Con el regreso del crawling peg, el dólar oficial correrá a un ritmo de 3% mensual, según adelantó hace semanas el secretario de Política Económica, Gabriel Rubinstein. De esta manera, el Gobierno apunta a que el tipo de cambio continúe actuando como un ancla frente a la inflación, pero perdiendo menos competitividad respecto de cuando permanecía fijo.
También al alza se mostraron este miércoles las cotizaciones financieras. Sin embargo, luego de avanzar hasta 1,5%, también moderaron las subas y el dólar MEP avanzaba 0,1% para quedar debajo de los $870, mientras que el contado con liquidación (CCL) trepaba 0,4% para ubicarse apenas debajo de $879.
Este aumento de las cotizaciones financieras se da en momentos en los que analistas privados advierten que el equipo económico agota municiones para contener a los dólares paralelos en la previa electoral.