Buenos Aires — El Banco Central argentino recortó en otros 10 puntos porcentuales la tasa de política monetaria. La decisión, que lleva la tasa de pases pasivos al 60% de TNA y la Tasa Efectiva Anual a niveles del 82%, fue informada a los inversores a través de la plataforma en la que opera el mercado y confirmada a Bloomberg Línea por una fuente con conocimiento del asunto que pidió reserva.
Se trata de la segunda baja de tasas que convalida el BCRA en el mes y la tercera desde que comenzó el año. La medida representa una señal inequívoca de que en el equipo económico confían en que la inflación continuará desacelerándose tras marcar 11% en marzo. Pero también puede leerse como una estrategia para apuntalar el ingreso de pesos a títulos del Tesoro en la licitación que está efectuando la Secretaría de Finanzas y cuyo resultado se conocerá este jueves.
“Es para ayudar a la licitación y que la licitación arbitre con esa baja de tasa”, analizó Gabriel Caamaño, economista de consultora Ledesma. “Están diciéndole a los pesos que se vuelvan de nuevo para el otro lado”, añadió.
Menor presión a la emisión endógena
Con este nuevo recorte de la tasa de política monetaria, el Banco Central busca además seguir reduciendo el peso del déficit cuasifiscal. Si bien desde el cambio de Gobierno se observa una fuerte caída en términos reales, los intereses acumulados por las Leliq y pases desde la asunción de Javier Milei superaron los AR$10 billones.
De acuerdo a los cálculos del equipo económico, la última baja de tasas de 10 puntos porcentuales para los pases pasivos –cuyo stock supera los AR$32 billones– implicó una reducción de emisión monetaria endógena de AR$300.000 millones por mes. El recorte anterior, de 20 puntos porcentuales convalidado en marzo, había significado un ahorro cercano a los AR$530.000 millones por mes.
Según los números que manejan dentro del oficialismo, mantener las tasas de interés en terreno positivo habría significado tener que emitir una base monetaria al mes. Con este último recorte, la tasa de política monetaria acumula una baja de 73 puntos porcentuales desde el cambio de gestión. Con dicho recorte, la TEA pasó de niveles del 255% al 82%.
Expectativas positivas para la inflación
La baja de tasas refleja también el optimismo del Gobierno respecto de la desaceleración de la inflación, luego de que algunas mediciones privadas sugirieran que el registro de abril podría volver a ubicarse en niveles de un dígito.
“Algunas consultoras privadas publicaron estimaciones de la inflación núcleo de la semana anterior que rondan entre el -0,8% y el 1%, lo que indica que la inflación de abril estaría en un dígito”, manifestó este jueves el vocero presidencial, Manuel Adorni.
Esta semana, Bloomberg News informó que el equipo económico del presidente argentino Javier Milei ve una desaceleración de la inflación mensual mucho más rápida este año de lo que los analistas anticipan, una visión poco común de las proyecciones de sus asesores en su intento de sacar al país de la crisis.
Según una presentación elaborada por la oficina del secretario de Política Económica Joaquín Cottani, uno de los principales subordinados del ministro de Economía Luis Caputo, se pronostica que el aumento de precios al consumidor se desacelerará al 3,8% para septiembre. En marzo, los analistas encuestados por el Banco Central esperaban una inflación mensual del 6,2% para ese mes.