Economía del conocimiento: qué piden las empresas para que el sector crezca en Argentina

El rubro asegura que la actividad se desempeñó en el primer semestre con “una grave inestabilidad económica” y advierte sobre un “amesetamiento” ante una creciente informalidad

Por

Buenos Aires — Las empresas que integran la industria de la Economía del conocimiento pidieron al próximo Gobierno una estabilización de la macroeconomía por entender que se trata de uno de los pilares para que el sector pueda superar el estancamiento por el que atraviesa hace diez años. En ese escenario, presentaron sus propuestas a los candidatos presidenciales, con lo que se encuentran a la expectativa de la llegada de políticas que permitan dar impulso a la actividad.

El segmento lidera el desarrollo económico del siglo XXI y, en el plano local, “el primer semestre de 2023 transcurrió en medio de una grave inestabilidad económica, a la que se sumaron los efectos políticos del inicio de las campañas electorales de todas las fuerzas políticas, lo que a su vez incidió en la agenda parlamentaria”, analizó el informe Argenconomics que da cuenta de la performance del rubro durante la primera mitad del año.

--- Seguínos en las redes sociales de Bloomberg Línea Argentina: Twitter, Facebook e Instagram ---

La combinación de estos factores empeoró el marco de gran incertidumbre ya existente, afectando la capacidad de nuestro ecosistema para sostener su competitividad frente a países con fuertes políticas de atracción de las industrias del conocimiento”, sostuvo el sondeo elaborado por Argencon, entidad argentina que agrupa a empresas prestadoras de servicios de todos los verticales de la Economía del Conocimiento.

Según el reporte que se basa en datos de exportaciones que provee INDEC, actualizados hasta junio de 2023, y datos de empleo del Ministerio de Trabajo, a marzo del mismo año, las exportaciones de las industrias de la economía del conocimiento mostraron un crecimiento interanual nominal del 8,8%, al alcanzar en junio de 2023 un valor anual de U$S8.000 millones.

Sin embargo, se trata de un avance que no representó un incremento real del nivel de actividad, sino que fue resultado del efecto del atraso del tipo de cambio sobre los salarios medidos en dólares. “Descontado el efecto monetario, el nivel de actividad de las exportaciones se mantuvo en valores similares a 2022″, señaló el trabajo.

El costo en dólares de los servicios profesionales se encareció mucho. Por ejemplo, una hora de un programador, se ha encarecido en dólares oficiales. Es el mismo servicio a un precio mayor. Se dio un crecimiento de valor nominal en valores expresados al tipo de cambio oficial. Si se quita ese efecto nominal a la actividad, el nivel es el mismo que en 2022. Estamos amesetados en la última década por la informalidad”, explicó Luis Galeazzi, CEO de Argencon.

Al presentar el estudio ante la prensa, evaluó que “hay un crecimiento del sector, pero mucho de ese crecimiento no se registra por estar en el segmento informal”. “Creemos que hay un 25% o 30% que está en la línea informal”, estimó.

El trabajo sostuvo que a pesar de las “positivas condiciones internacionales”, la Argentina “no gana participación en el mercado de exportaciones global ni regional”, una situación “directamente relacionada a las endémicas dificultades para el desarrollo de la oferta competitiva”.

Ante ese escenario, desde la cámara aseguran que se necesita una estabilización de la macroeconomía para que el sector pueda aprovechar el potencial con el que cuenta. “Ya pasó el boom después de la pandemia y ahora estamos en un achatamiento”, apuntó Galeazzi.

La propuesta de la industria

Los referentes del sector presentaron a los candidatos presidenciales una propuesta para optimizar la actividad, por entender que “la existencia de un potente ecosistema de Economía del Conocimiento (EdC) en Argentina es un factor central de su desarrollo presente y futuro”.

Estar fuera de este flujo evolutivo es condenar a nuestro país a ser dependiente de aquellos que lideran el progreso mundial”, apuntó Argencon.

El Plan Federal fue pensado para ser implementado durante los tres próximos períodos de Gobierno, es decir, de 2023-2035: “Es un lapso que consideramos necesario para dar continuidad a las iniciativas y desarrollar plenamente el valor potencial de la EdC en nuestra sociedad”.

La iniciativa se compone de cuatro ejes: Gobernanza, Competitividad, Recursos y Desarrollo.

En cuanto al primer punto, la propuesta asegura que “se requiere un acuerdo político que exceda el horizonte de un gobierno y que establezca reglas de juego estables que permitan inversiones y proyectos de mediano y largo plazo”.

Sobre la “competitividad”, la propuesta argumenta que “se consolida en el espacio global y para desarrollarse requiere que el ecosistema local pueda competir sin desventajas frente al de otros países referentes”.

“En Argentina, los exportadores hoy reciben un valor parcial por sus exportaciones, que los impulsa a migrar sus operaciones a países donde sus ventas reciben el valor pleno facturado. Se produce así una `fuga de empresas` hacia países que permiten operar con más rentabilidad”, argumentó.

En cuanto al eje vinculado con “Recursos”, la entidad afirmó que busca abarcar el tratamiento de los recursos elementales para el desarrollo de la actividad: “talento, equipamiento y conectividad”.

En tanto, a la hora de referirse al punto relacionado con “Desarrollo”, apuntó a las áreas específicas sobre las cuales enfocar programas para impulsar al sector tanto en la esfera nacional y provincial, como en su proyección internacional.

La velocidad de implementación de estas medidas determinará la rapidez con que se obtendrán los resultados esperados en cuanto a incremento de empleo, de exportaciones, de recaudación fiscal y previsional, de ingreso de divisas y de despliegue federal”, remarcó.