Buenos Aires — El dólar tarjeta alcanzó los ARS$1.500 en la previa de las vacaciones de invierno. La cotización que se toma para los pagos con tarjetas de crédito o débito en moneda extranjera trepó este miércoles a un nuevo máximo nominal y se sostiene como la más alta del mercado, ubicándose 4% por encima del dólar blue y 8% más cara que los dólares financieros.
Cuando faltan apenas tres días para que comiencen las vacaciones de invierno, la cotización del dólar tarjeta cobra especial relevancia dado que es la que se aplica sobre los consumos que realicen los turistas argentinos con tarjeta de crédito o débito en el exterior. En rigor, es la que se aplica a todos los consumos que se realicen con plásticos en moneda extranjera.
Sin embargo, quienes quieran evitar pagar por cada dólar la cotización más elevada del mercado pueden hacerlo. Pero para ello, deberán contar con una caja de ahorro en dólares e instruir a los bancos a que debiten los consumos en moneda extranjera desde esa cuenta o pagar el resumen con dólares propios.
Menor brecha y efecto en reservas
A pesar de esta suba reciente que ubicó al dólar tarjeta en ARS$1.500, la diferencia entre esa cotización y el resto de los dólares paralelos se acortó de manera significativa en las últimas semanas.
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Hasta hace apenas dos meses, de hecho, la diferencia entre el dólar tarjeta y los paralelos desalentaba la demanda de dólares en el mercado oficial de cambios. Comprar dólares para ahorro o viajes (o mismo pagar consumos en moneda extranjera con tarjetas) en ese segmento era entre 35% y 40% más caro que hacerse de divisas a través del mercado bursátil.
Pero con los recientes aumentos de los paralelos, la brecha entre esas cotizaciones y la del dólar tarjeta se recortó a mínimos.
Esa compresión, que hace más atractiva la demanda de divisas en el mercado oficial, se da encima en la antesala de las vacaciones de invierno y en el inicio de un trimestre en el que el equipo económico ya adelantó que espera perder unos US$2.000 millones de reservas.
En su último informe semanal, la consultora Econviews recordó que en el rubro de turismo venia ayudando a la dinámica de las reservas que los dólares paralelos estaban más baratos que el dólar turista. “Eso hacía que haya menos demanda en el mercado oficial”, recordaron.
Sin embargo, añadieron, “con la suba de la brecha esa diferencia se achicó y ya no es obvio que convenga evitar la tarjeta”.
Esa menor diferencia entre las cotizaciones del dólar tarjeta y los paralelos observada en los últimos días, por lo tanto, podría derivar en más de demanda de dólares oficiales por turismo lo cual pone más presión al Banco Central para acumular reservas.
